La capacitación y profesionalización de los trabajadores siempre debiera suponer una mejora en sus condiciones laborales. Sin embargo la realidad, lamentablemente, mucho dista de esa lógica.

Este es el caso de Erica Ainqueo quien durante más de dos años se desempeñó como enfermera del Hospital Zonal Esquel en calidad de becaria desempeñándose bajo la modalidad de contrato. El mismo no fue renovado ya que – según se adujo- carecía de la matrícula. No obstante luego de obtenerla su continuidad laboral sigue afectada.

En declaraciones a La Portada la trabajadora relató su caso señalando que “soy enfermera recibida desde el año pasado. Desde 2018 estuve trabajando como becada en el Hospital Esquel. En junio me dijeron que no me renovarían el contrato. En marzo ya me habían dicho que me suspenderían debido a la contingencia sanitaria puesto que al ser becaria no tenía el seguro correspondiente. Fue así que me enteré que estuve más de dos años trabajando sin seguro. Cuando fue lo del Hantavirus yo estuve trabajando y nadie me dijo que no tenia seguro. Estuve trabajando un año en Salud Mental que también es un servicio de riesgo”.

“En mayo me avisaron que no se me renovaría el contrato por no tener la matricula habilitante. Y yo la estaba tramitando porque ya estoy recibida, pero con la pandemia todo se demoró un poco más. En junio conseguí mi matrícula y presenté los papeles en el Hospital estando aún contratada”, relató.

“Me dijeron que esa matrícula no me sirve y que no hay vacantes para ingresar. Se reconoce el déficit de personal en Enfermería, pero dicen que no pueden hacer nada”, manifestó. Y agregó que “es muy injusto que después de haber estado dos años con un contrato, ahora que tengo la posibilidad de que mi situación laboral mejore no haya una vacante”.

“Falta de voluntad”

En el marco de los reclamos, la trabajadora, realizó una campaña de visibilización de su situación y escribió una carta a Fabián Puratich ministro de Salud de la provincia “para que sepa cuál es la situación porque para mí el problema está acá. Siento que no hay voluntad (de las autoridades del Hospital) para resolver esto. Ahora que tengo lo papeles me dicen que no tengo una vacante”.

“Que ingresen 14 mil pesos menos en casa, teniendo dos hijos, tiene un impacto económico. Y, además, durante la etapa de estudio de la carrera tenía la esperanza de poder tener mejores condiciones laborales. En esos dos años y medio fui responsable, abocada y profesional. Hice cursos mientras estudiaba y trabajaba. Siempre estuve comprometida con el sector que me tocó trabajar. La situación es angustiante porque mis hijos están a cargo mío”, manifestó.

Al ser consultada sobre una posible reacción personal en su contra sostuvo que “no lo descarto, pero tampoco lo afirmo”. Para finalizar remarcó que “yo no tengo nada en contra de la dirección del Hospital, solo necesito trabajar” y se esperanzó con la posibilidad de dialogar con el Ministro de Salud.