La ocupación de tierras fiscales deja al descubierto una necesidad latente: el acceso a la vivienda. Difícil. Casi imposible para muchas familias. En Esquel hacen falta 5 mil soluciones habitacionales, explican quienes están en tema. La ubicación irregular en zonas de riesgo es efecto colateral que también merece la atención del Estado.
Concejales de distintos bloques recibieron días atrás a un grupo de vecinos instalados camino a “Valle Chico”. A pocos pasos de un proyecto de urbanización del IPV. Piden el título de propiedad para que la Cooperativa “16 de Octubre” ponga los servicios de energía eléctrica, agua y cloaca. “Tenemos las casas listas pero no contamos con la luz”, cuentan y dicen que ya agotaron todas las instancias.
El reclamo puso nuevamente en debate problemáticas que el Estado -con todos sus resortes- debe afrontar con cierta rapidez y no mirar hacia otro lado. La demanda de viviendas crece en silencio y de la mano surgen ocupaciones, muchas de las cuales tienen desarrollo en sectores considerados de alto riesgo. Valle Chico y la parte alta del Cañadón de Bórquez, dos ejemplos.
Negocio sin escrúpulos
El intendente Sergio Ongarato es tajante y avisa que la Municipalidad no autorizará bajo ningún concepto la instalación de servicios públicos en casas expuestas a peligros tales como derrumbes y desplazamiento de piedras. “Si uno da el agua o la luz terminan asentándose en forma definitiva”, entiende y comenta que de esa manera fueron creciendo en población varios barrios de la localidad.
Molesto habla de un negocio inmobiliario turbio, que se nutre de los desprotegidos. “Hay quienes venden estos terrenos (en lugares de riesgo) como si fuesen propios y a valores altos. Los ofrecen en facebook. Está el aprovechamiento sobre gente desesperada. A estos inescrupulosos les vamos a caer con todo el peso de la ley”, afirma.
Gestionar las tierras en manos de Nación
El concejal Oscar Cheuque sostuvo que el déficit habitacional aumenta con el correr de los años y reconoció que ante un laberinto sin salida algunos deciden situarse en tierras fiscales. Habló de alquileres gigantes al lado de salarios que lucen pequeños. Preocupado, planteó que cientos de jóvenes ven lejana la posibilidad del techo propio.
“Creemos que desde el municipio se deben tomar medidas y decisiones políticas que posibiliten el acceso a la vivienda”, manifestó el edil del FpV. Propuso además que el Departamento Ejecutivo gestione la incorporación de predios grandes hoy en manos del Estado Nacional. Cuestionó que no existe determinación para avanzar en ese sentido.
Indicó que las hectáreas propiedad de nación son improductivas, sin una utilidad clara cuando permitirían mitigar la demanda de lotes. “Esto forma parte de una propuesta que hicimos hace bastante relacionada con el ordenamiento territorial y la planificación urbana. Creemos que es importante afrontar la cuestión”, soltó.
Comisión especial
Aseguró Cheuque que los inconvenientes de tipo habitacional exigen una clara posición política del municipio. “Primero las gestiones con los organismos nacionales para acceder a los terrenos y segundo una planificación urbana. También es necesaria una comisión que se aboque al tema de la vivienda. Asimismo, un pedido puntual para dotar de presupuesto al Banco de Tierras”, amplió.
Por su parte, el concejal Flavio Romano, del Frente Vecinal, hace tiempo viene impulsando la conformación de un Consejo Municipal de la Vivienda que lo integren actores como el IPV, inmobiliarias, asociaciones, funcionarios, etc. Pretende lograr una mesa de diálogo cuyo objetivo sea arbitrar los mecanismos para que el vecino tenga allanado el camino hacia la casa propia.