Existe mucha preocupación en localidades de la Comarca Andina debido a la intención del gobierno nacional de cerrar las oficinas del Correo Argentino. Los trabajadores de sucursales como Gualjaina, Epuyén o El Maitén ya están al tanto de esta situación y lo mismo ocurre en Cholila.

Héctor Sarmiento, empleado con 42 años de antigüedad, está a cargo de la delegación de esta última localidad. En diálogo con La Portada, Sarmiento compartió que está a días de cumplir 60 años de edad y se encuentra a cinco de alcanzar la edad jubilatoria, pero ahora se encuentra en la disyuntiva de aceptar un retiro voluntario o exponerse a ser despedido.

Afirmó que “como pasó en Corcovado va a pasar en Trevelin, Gualjaina, Cholila, Epuyén, El Maitén y Lago Puelo”. En este sentido, expuso que la idea es dejar como cabeceras a Esquel y El Bolsón, no dejando más alternativas a los vecinos que trasladarse en caso de ser necesario.

“Todos los correos de la provincia, los chicos, no van a existir más”, relató. Los habitantes Cholila “para hacer un trámite por medio del correo, van a tener que hacer 120 kilómetros para viajar a Esquel o 70 a El Bolsón”.

“A todos los empleados nos han dicho que nos tenemos que ir con el retiro voluntario”, agregó Sarmiento. “Nos dicen esta es tu plata, si no la aceptás no sabemos lo que te puede pasar”, comentó con preocupación y resaltó que con estas comunicaciones les dejan en claro que pueden echarlos.

El sábado pasado tuvo lugar una movilización a la sucursal en Cholila para reclamar por el posible cierre, con mensajes como “el correo es del pueblo” y “al final la casta era el correo y sus trabajadores”.

Para Sarmiento, el plazo es el 24 de mayo porque dentro de la institución se habla que “después de que se firme el famoso pacto de mayo” podrían concretarse las amenazas de despido. Aunque ahora el propio presidente, Javier Milei, reconoció que la firma de ese acuerdo podría postergarse.

En este escenario, la situación es angustiante: “Me quedan 5 años para jubilarme y yo quiero seguir trabajando. Soy una persona de 60 y hay que ser realista, en el mercado laboral ya no existimos, aunque dicen que quieren alargar la edad jubilatoria, pero piden gente joven y con más estudios”. Si bien “el retiro es buena plata”, advirtió que no lo es tanto considerando que pierde 5 años más de trabajo.

Por último, agradeció a la comunidad su apoyo: “Es un mimo al corazón, la gente se preocupa porque les van a quitar algo que es fundamental”.