A mediados del año 2020 las secretarías de Producción y de Ambiente de la Municipalidad de Trevelin y sus Parajes, en el contexto de la implementación de las nuevas normativas de SENASA en relación a los engordes a corral, invitaron a investigadoras del CIEMEP a fin de consultar acerca del estudio realizado en diferentes arroyos de Trevelin y Aldea Escolar que se encontraban asociados a distintas actividades productivas.
El estudio buscó evaluar los efectos de dichas actividades sobre la calidad del agua, la integridad ecológica y los macroinvertebrados en arroyos de piedemonte. Pudo observarse que algunos de los arroyos presentan indicadores de degradación moderada asociados a la presencia de animales dentro de los cauces. Si bien como mencionaron el nivel de impacto de la actividad es aún incipiente, es importante tomar estos indicadores como alertas tempranas, para generar cambios en los sistemas de producción, tendientes a conservar y mejorar la calidad de los recursos hídricos de los que disponen los productores y la sociedad en general.
Si bien el secretario de Producción, Francisco Hammond remarcó que, “no son numerosos los engordes a corral de vacunos en Trevelin, en muchos casos éstos se encuentran ubicados sobre cauces naturales de arroyos en la zona del Valle, lo cual a largo plazo genera impactos en los mismos”, y esto, “en algunos casos genera inconvenientes entre vecinos”.
Para revertir la situación buscando a su vez no entorpecer el desarrollo de la ganadería, Hammond informó que durante el año 2021, “se acompañó al primer productor que tuvo que presentar el plan de manejo ambiental de su actividad. Y hay otros 3 engordes a corral que están en vías de adecuación”. “El cometido principal desde la administración municipal es evitar la presencia de animales de manera permanente en los cauces de los arroyos y acompañar el proceso de ejecución de los planes de manejo para no perjudicar la actividad productiva”, planteó.
La política de readecuación se enmarca en la normativa vigente desde el año 2017, establecida por SENASA, que establece que los engordes a corral o feed lot, deben tener una habilitación Municipal. “Por ello, se resolvió acompañar al productor poniendo a disposición los técnicos, que pueden hacer el plan de gestión ambiental, y también desde lo técnico profesional, aportando e interactuando con los técnicos y los productores. La presentación del plan no tiene un costo elevado y los técnicos con los que trabajamos han resuelto de manera rápida y profesional los desafíos que se les presentaron en cuanto a modificación de infraestructura”, concluyó el secretario de Producción.