Intendente dijo que abandonó Cambiemos porque le pedían “hablar mal del Gobernador”

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Ariel Molina, intendente municipal de Corcovado, ratificó en diálogo con diario La Portada que decidió alejarse de la alianza Cambiemos porque le pedían “hablar mal del gobernador” Mariano Arcioni. Adelantó, por otro lado, que en las elecciones del 2019 no irá por un segundo mandato. ¿Buscará una banca en la Legislatura Provincial?

Molina ganó la Intendencia del municipio cordillerano en la boleta amarilla de Cambiemos pero al poco tiempo comenzó a mostrar sintonía fina con el Gobierno Provincial. Según indicó en la entrevista concedida a este medio, esa cercanía le causó varios dolores de cabeza y enfrentamientos con dirigentes de peso del PRO.

Dijo que durante gran parte del 2016 aguardó una ayuda de la Casa Rosada para mejorar la calidad de vida de los vecinos de Corcovado a través de obras pero no recibió respuestas. Al preguntar los motivos topó con un argumento inesperado del círculo de Marcelo Cano. “Me dijeron que no bajaban nada porque estaba cerca de Mariano Arcioni”, cuestionó.

Le reprochaban, planteó, desde la órbita de Cambiemos declaraciones públicas favorables al actual mandatario chubutense. “Eso quería decir que debía hablar mal para que me bajen fondos”, criticó y dejó en claro que nadie lo disciplina con la billetera. “Estoy en política para hacer algo distinto. Nadie me meterá presión para que hable bien o mal de alguien”, manifestó.

Sin reelección

Molina adelantó a La Portada que no buscará cuatro años más en el municipio y que su futuro pasa por otro lado después de octubre del 2019. Si bien no dio pistas al respecto, se cree que podría ser candidato a diputado provincial. Su llegada a Fontana 50 hace presuponer que acompañaría a Arcioni si éste decide finalmente ir por la Gobernación.

Contó luego que piensa encontrar algún vecino de la localidad capaz de darle continuidad a su proyecto en la Municipalidad. “Personalmente voy a seguir ligado al mundo de la política pero no como intendente”, señaló, agregando al mismo tiempo que “estamos analizando posibilidades. Aún nada concreto”.

Economía y viviendas

Por otro lado aseveró que, pese al escenario económico general del país y la provincia, el municipio está con las cuentas equilibradas. “Financieramente estamos bien”, enfatizó y marcó como ejemplo el hecho de construir viviendas con recursos propios. Es un plan de once soluciones habitacionales para familias de la localidad.

Aseguró que una administración austera, y sin ingreso de nuevos empleados, permitió no sufrir complicaciones. A su vez, recordó que a poco de asumir en la gestión la realidad era adversa y que hasta tuvo que poner dinero de su bolsillo para completar el pago de salarios a trabajadores. “Encontré más de 3 millones de pesos en deuda, entre sueldos y proveedores”, destacó.