Los referentes sociales Emilse Saavedra y César Antillanca, precandidatos a diputados nacionales por el MST en Chubut, visitarán este viernes Esquel y Trevelin con el fin de acercarle a los vecinos su propuesta electoral, que tiene como ejes principales a los jóvenes, la cuestión de género y el medio ambiente. “Somos la alternativa al ajuste del gobierno actual y al falso progresismo del kirchnerismo”, aseguró a La Portada Maximiliano Masquijo, quien también integra la Lista 38.
A pocas semanas de que se lleven a cabo las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias del domingo 13 de agosto, los precandidatos a diputados nacionales por el Movimiento Socialista de los Trabajadores en Chubut intensificaron su recorrida por la provincia y este viernes tienen programada una visita a Esquel y Trevelin donde realizarán un almuerzo con militantes y la difusión de sus propuestas.
La Lista 38 se encuentra encabezada por la estudiante universitaria Emilse Saavedra y César Antillanca, ambos oriundos de Comodoro Rivadavia y reconocidos por sus luchas sociales, acompañados por Maximiliano Masquijo, docente y ambientalista de la Cordillera, y Melina García, de la agrupación “Juntas y a la Izquierda”.
El primer objetivo será superar las PASO para lo cual deberán obtener un 1,5 por ciento de los votos del electorado. “Esta reforma política se hizo para perjudicar a los partidos con menos recursos como nosotros”, opinó Maximiliano Masquijo, precandidato suplente a diputado nacional, quien recordó que en la última elección el MST alcanzó un 6,5 por ciento de los votos en Trevelin.
Ante los escasos recursos del partido, destacó que la campaña se realiza a través de las redes sociales, con el boca en boca y apelando a la creatividad. “Somos optimistas y por eso nos presentamos, sobre todo por la necesidad política de ser una alternativa al ajuste permanente del gobierno actual y al falso progresismo del kirchnerismo”, apuntó.
Fuertes impuestos a la riqueza
Masquijo señaló que con las emergencias climáticas que azotaron la provincia quedó en evidencia “la ineficiencia de la infraestructura social”, y citó como ejemplo el caso de Comodoro Rivadavia donde, a pesar del negocio del petróleo, quedó al desnudo la nula distribución de la riqueza en la ciudad”. Propuso nacionalizar el comercio exterior “porque de lo contrario las empresas se quedan con todo e incluso el Estado termina subsidiando la exportación, y aplicar fuertes impuestos, que sean progresivos; medidas que sólo las pueden sostener luchadores como Emilse y César, no los partidos tradicionales que expresan los intereses de las corporaciones”.
Manifestó además la preocupación del espacio político por la falta de asignación de presupuestos en la cuestión de género como también de la declaración de emergencia a nivel nacional, y destacó el rotundo rechazo rotundo a la megaminería y el fracking como modalidades no convencionales de explotación irracional de los recursos”.