Rocío Esteban: “Sigo luchando a pesar de las ausencias”

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Rocío Esteban, presidenta de la Fundación Estrellas Amarillas en Chubut, convive a diario con el dolor de la pérdida de su hijo Lorenzo en un accidente de tránsito. Impulsó campañas de concientización vial y logró que haya Alcohol Cero al volante en Esquel. Pero los cambios en la ordenanza la decepcionaron. Pidió audiencias con el intendente Ongarato pero nunca la recibió. “La justicia no te ayuda y el Estado no te acompaña”, expresó.

La pérdida de su hijo Lorenzo, quien fue víctima de un siniestro vial, la sumió en un profundo sentimiento de dolor y tristeza. Todos los días lucha por mantenerse en pie y es el recuerdo de su hijo, su familia y sus amigos los que les dan la fuerza para hacerlo.

Rocío no encontró las respuestas que esperaba de la justicia por la muerte de su hijo pero no quiere que nadie más viva el dolor con el que convive a diario. Junto a su mamá, lograron que Esquel adhiera a la Campaña Nacional de las Estrellas Amarillas y a la ordenanza de Tolerancia Cero al Conducir. Ha acompañado a familias de víctimas de siniestros viales en la ciudad y en la provincia a pintar su estrella amarilla y en los pedidos de justicia. La Escuelita Vial de Chubut lleva el nombre de su hijo, Lorenzo Rossi, y ha recorrido diversas localidades con este programa. También logró la creación de la Fundación Estrellas Amarillas en Chubut, de la cual se encuentra a cargo y con la que espera seguir impulsando diversos proyectos.

También se consiguió que Chubut declare de Interés Legislativo la Campaña Nacional de Concientización Vial “Estrellas Amarillas” y apruebe la Ley de Tolerancia Cero con el objetivo de reducir la probabilidad de ocurrencia de siniestros viales como resultado del consumo de alcohol y estupefacientes.

En diálogo con La Portada, Rocío Esteban contó que se siente sola y que necesita un equipo de trabajo para poder seguir avanzando en la concientización vial de la población desde la Fundación que preside. “Invito a todos los que se quieran sumar y colaborar porque sola no puedo hacerlo”, expresó.

Hoy tiene el apoyo y el acompañamiento de su familia y amigos pero le gustaría contar con la colaboración de profesionales idóneos para elaborar proyectos y asistir a las familias.

Por otra parte Rocío se manifestó decepcionada con la modificación que el Concejo Deliberante de Esquel le realizó a la ordenanza de Tolerancia Cero, permitiendo que se designe un conductor responsable y no se retenga el vehículo. “Esto no existe ni en la Ley Nacional de Tránsito pero nadie dice nada porque es un beneficio para todos. Yo quiero saber quién se va a ser responsable si el conductor alternativo deja que la persona alcoholizada continúe manejando hasta su casa y pasa algo”, planteó.  

De esta manera pidió que den explicaciones del criterio que utilizaron para modificar la ordenanza. “Son los mismos concejales que un día me dijeron que contara con ellos para lo que necesite. Los accidentes son evitables pero sólo piensan en el turismo”, manifestó.

Sin embargo señaló que “si yo me voy de turista a algún lugar, lo mejor que me puede pasar es que haya una buena prevención y que no me mate un borracho. De esta manera voy a llegar sana y salva a mi casa. Pero parece que sólo lo pienso yo por lo que me pasó y que no fue por turistear”.

Rocío también comentó que a lo largo de estos años ha presentado numerosos pedidos de audiencia con el intendente Sergio Ongarato pero “jamás nos recibió”. Sí destacó el acompañamiento que ha recibido de Julio Ruiz, Matías Taccetta y de Mariela Sánchez Uribe. “Uno le pone el pecho, el amor y el dolor para que cinco personas –por los concejales oficialistas- hagan las cosas mal. Nadie va a estar en tus zapatos, la justicia no te ayuda y el Estado no te acompaña. Uno sigue viviendo como puede, yo me podría haber quedado en mi casa llorando, pero uno trata de hacer lo que puede con lo que tiene y con la fuerza que le queda para mejorar ciertas cosas. Recién ahora se habla de los siniestros viales, antes ni se hablaba y es el crimen perfecto porque no tiene condena. Uno se encuentra en una situación de dolor y de querer cambiar el mundo pero solo no podés hacerlo”, finalizó.