“En Esquel se ve un amesatamiento alto de los casos”, dijo el ministro de Salud

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La curva de contagios en Esquel está planchada hace un tiempo. Pero no baja y de ahí la preocupación de las autoridades. Los reportes epidemiológicos en las últimas semanas muestran que los casos diarios varían entre 30 y 50, aproximadamente. 

“Se ve un amesatamiento alto”, aseguró Puratich y bregó porque el número de positivos para coronavirus descienda. “Esto es para poder brindarle la atención a quien más necesidades tenga”, manifestó el funcionario provincial.

Las recomendaciones son las de siempre: usar tapaboca, mantener el distanciamiento entre personas, utilizar alcohol en gel e higienizarse las manos de forma frecuente, ventilar ambientes y no compartir elementos como el mate por ejemplo.

Respecto al movimiento turístico en la región de la Cordillera y el desplazamiento de gente previsto para los días de Semana Santa, afirmó que el virus “viaja” con las personas. “A mayor movimiento, mayor riesgo de que exista la enfermedad”, aseveró.

“También uno entiende la situación y la necesidad que tiene el prestador. Hay que resaltar que es indispensable mantener los cuidados y protocolos de bioseguridad. Debe reforzarse eso. La realidad  es que el turista se cuidad mucho”, amplió.

Vacunación

El ministro de Salud detalló luego que el plan de vacunación prevé alcanzar a unos 150 mil chubutenses. “Con las vacunas que recibimos ahora, llegamos a alrededor del 35% de la población objetivo”, recalcó.

“Uno quisiera que todo sea más rápido. Hay muchos inconvenientes en el mundo por la disponibilidad de vacunas. Unos 18 países concentran el 88% de la producción. Los estados más poderosos hicieron el lobby necesario para quedarse con las vacunas”, dijo.

Rescató que hace unos días en Chubut alcanzaron el ritmo de vacunación esperado, unas 11 mil dosis por semana. “Eso depende claro está de la cantidad que llegue a la provincia. Eso condicionará la velocidad del plan de vacunación”, avisó.

Terapia Intensiva

Afirmó que en el correr de los últimos meses la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Zonal sumó dos profesionales. “Hay ocho médicos terapistas. Es un buen número. La idea es no llegar a ocupar las camas. El norte es trabajar de manera anticipada para que los casos graves sean menos”.