Nuevo director de INTA: Li quiere fortalecer las producciones tradicionales y promover las nuevas alternativas de desarrollo

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El Ingeniero Sebastián Li asumió hace un par de semanas como director de la Estación Experimental Agroforestal (EEA) de INTA. En una entrevista con diario La Portada, repasó algunos lineamientos de trabajo. 

Este joven profesional de la agronomía reemplazó en el cargo a Osvaldo Buratovich, quien venía desempeñándose al frente de la Dirección hace 12 años, aproximadamente. Ni bien fue puesto en funciones, mantuvo una reunión con el personal y compartió su propuesta de gestión.

En el encuentro con los trabajadores habló de objetivos para INTA, quiénes son sus beneficiarios y detalló el marco político, económico y productivo dentro del área de cobertura de la EEA. Se refirió a la nueva cartera de proyectos sobre los que se enfocará.

Li explicó -en la charla con este medio- que el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria posee estaciones experimentales en diversos puntos de la Argentina. En la Provincia del Chubut son dos, una funciona en la ciudad de Trelew y la otra en Esquel.

Unas 70 personas prestan servicio en la EEA de la localidad, las cuales están distribuidas en el edificio central de calle Chacabuco y Darwin, el campo experimental ubicado en Aldea Escolar y las cinco agencias localizadas en varios puntos de la zona.  

Puertas adentro

Dijo que como cualquier otra organización, existen dos dimensiones fundamentales a tener cuenta: una, puertas adentro y, otra, hacia el exterior. En ese sentido, apostó a lograr un fortalecimiento institucional y destacó el recurso humano disponible. Una combinación entre experiencia y juventud que enriquece el hilo de programas.   

Recordó que el INTA es un organismo autárquico con cierta autonomía en materia económica y de estrecha vinculación con el Ministerio de Agricultura de la Nación a través de programas puntuales como, por ejemplo, el denominado “Cambio Rural”.

Señaló luego que aguardan la definición del presupuesto nacional para tener un mapa más claro del financiamiento y las herramientas para la marcha de proyectos en terreno. Reconoció, a su vez, que estos últimos años fueron complejos.

“Ha sido bastante crítica la situación sobre todo en lo operativo”, expuso, acotando que el período del Gobierno anterior fue difícil “para poder llevar adelante el trabajo tanto de investigación como de extensión en nuestra relación con el productor”.

Puertas afuera

Precisó que por otro lado están las acciones de INTA en “articulación y vinculación con el sector productivo”. Fue en ese sentido en el que propuso “promover” las actividades tradicionales extensivas para beneficio de estructuras como la ganadería ovina – bovina tanto en la Cordillera como en la Meseta.

Al mismo tiempo planteó Li apoyar el surgimiento de nuevas formas de desarrollo para las comunidades tendientes, por ejemplo, a la generación de alimentos y el abastecimiento local, en definitiva propuestas orientadas al emprendedorismo.

Confió además que como Estación Experimental la de Esquel tiene una “identidad” que la distingue por sobre otras y que guía las líneas de trabajo. En suma, el contexto (condiciones geográficas y demográficas, etc.) marca el pulso de las políticas locales.  

En otro orden, ponderó la importancia del trabajo articulado con instituciones: establecimientos educativos, ONG, universidad, CIEFAP, municipios y organismos estatales. Aseguró que es una impronta del INTA y que continuará durante su gestión.