“Trevelin viene mal con una situación que se remonta al Gobierno de Juan Garitano”, señaló la concejal electa por la Unión Cívica Radical (UCR), Ana Laura Ortiz. Advirtió, además, que en los últimos años hubo un “crecimiento” desorganizado y sin una adecuada planificación urbana.
Ortiz asumirá una banca por el radicalismo cuando se renueven las autoridades en el Honorable Concejo Deliberante (HCD). Compartirá bloque con Santiago González. Así el centenario partido regresa a la Casa de las Leyes tras un período de ausencia.
En una entrevista con diario La Portada, habló de su nuevo desafío legislativo, cuestionó a los últimos gobiernos municipales, adelantó cómo espera el trato con el Ejecutivo que comandará Héctor “Cano” Ingram y destacó que la UCR recuperó espacios de poder en la provincia.
Primero se detuvo en el incremento poblacional de Trevelin y afirmó que ese aumento en la cantidad de habitantes exige mejores servicios públicos, desarrollo urbanístico concreto, espacios de recreación y un municipio a la altura de esas circunstancias.
Crítica se mostró de algunas prestaciones dadas en la actualidad por el municipio y señaló como falencia la recolección de los residuos, que consideró no se está haciendo bien. “Para quienes vivimos en los barrios, en los callejones y en los parajes es un problema de todos los días”, lamentó.
Dejó en claro que el “crecimiento de Trevelin no ha sido organizado” y que no existe una adecuada planificación en virtud del incremento poblacional. “Si uno analiza lo ocurrido en el Concejo Deliberante en la actual gestión verá que hay muchas excepciones relacionadas a la construcción y urbanización”, manifestó.
Apostó por una localidad pensada estratégicamente para garantizarle mayores comodidades al vecino, no sólo desde el punto de vista de los servicios básicos como el gas y la luz sino que también en lo que respecta al transporte y las vías de circulación.
“Vemos que se lotean lugares sin saber qué vendrá después y dónde, por ejemplo, vamos a requerir más establecimientos educativos”, advirtió. La gestión de tierras para la construcción de viviendas ha sido una política del actual Concejo Deliberante.
Recalcó luego que el “Pueblo del Molino” debe definir claramente la matriz económica que dará oportunidades laborales a la gente, entendiendo que el turismo y la actividad productiva son dos variables relevantes.
Ponderó que la localidad tiene un sinfín de recursos para explotar y citó lo ocurrido en el mes de octubre de la mano del campo de tulipanes. Resaltó el movimiento de visitantes que generan los atractivos del corredor de la 259 y la necesidad de aprovecharlos.
Aseguró que el día que ese camino esté pavimentado habrá un salto enorme y que la zona debe estar preparada. La obra vial “permitirá el gran desarrollo de toda la ruta con la posibilidad de que Los Cipreses explote más“.
Relación con el Ejecutivo
“Todos queremos el bienestar y el desarrollo de la comunidad”, planteó al ser consultada sobre cómo vislumbra la relación con el Gobierno que liderará Héctor “Cano” Ingram a partir del 10 de diciembre próximo.
Dejó en claro que con su compañero de bloque siempre “tendremos las puertas abiertas al diálogo” y que construirán sobre la base del “respeto al otro”. Agregó que “no se trata de blanco o negro, de Boca o River. Acá ganamos si trabajamos en conjunto”.
Entendió que el rol de oposición te ubica en un lugar de mayor crítica a la gestión. “Se puede fiscalizar y exigir más control. El control y la evaluación a veces se toman como malas palabras. Y es lo mejor que puede pasar porque te da información”, añadió.
RECUADRO
La UCR
Por otro lado, destacó que el radicalismo comienza recuperar espacio en la provincia, mencionando la victoria en intendencias como la de Gaiman, Rawson y la ya consolidada de Esquel. Además rescató que en el Concejo Deliberante de Trevelin se ganaron dos bancas.
Señaló que en el “Pueblo del Molino” más allá de no alcanzar para conducir los destinos de la Municipalidad sí aumentaron considerablemente el caudal de votos respecto a los comicios del 2015. También ponderó que la propuesta de Tegid Evans fue netamente radical.