En julio de 2013, personal municipal retiró un añoso árbol de gran porte ubicado en la plazoleta de Avenida Alvear y Sarmiento, dejando solo una parte del tronco, de aproximadamente 2 metros de altura. Desde entonces, se presentaron varios proyectos para embellecerlo a través de diversas intervenciones artísticas.

Finalmente, luego de casi cinco años de permanecer en las mismas condiciones, el mencionado tronco fue intervenido, con figuras realizadas con la técnica del mosaiquismo, por las integrantes del taller “Locas por el Mosaico”.  La iniciativa fue aprobada por la Municipalidad de Esquel.

En el programa “Curiosa Mente” que se transmite por radio Nacional Esquel, Alicia Guerra (profesora del taller “Locas por el Mosaico”), recordó que ya había pedido autorización a distintas áreas municipales para intervenir dicho tronco durante la anterior gestión, pero nunca se llegó a un acuerdo.

“Había otras personas que lo habían pedido antes que yo, y en esta gestión lo volvimos a pedir”, señaló, remarcando que este trabajo es una donación a la ciudad ya que no recibieron “absolutamente nada de dinero”. Agregó que la idea surgió porque veía que ese tronco estaba “muy feo”.

“Fue una alegría impresionante cuando nos confirmaron que podíamos concretar el proyecto, el intendente fue muy abierto”, afirmó Guerra. En este sentido comentó que el único pedido que hicieron fue un empleado municipal con una motosierra para que haga algunos cortes y que Espacios Verdes lo limpiara.

Asimismo, la profesora de mosaiquismo aseguró que el trabajo “fue sencillo” y destacó que el intendente Sergio Ongarato, les pidió que entre los diseños hicieran una mutisia, la flor del pueblo. “También hicimos distintos mandalas, pájaros de la zona y tulipanes”, detalló resaltando que la materia prima y los materiales fueron puestos por el taller.

Finalmente, Guerra invitó a quienes quieran sumarse a su taller que se acerquen al pasaje Peñaloza 160, martes, miércoles y jueves de 17 a 20 hs. “Para mí es un placer que las chicas vengan al taller, compartir una tarde con ellas, es un disfrute, una terapia, un cable a tierra”, concluyó.

 

FOTO GENTILEZA: Mauro Mateos