El abogado laboralista Juan Rimoldi sostuvo que el proyecto de Reforma Laboral presentado por el gobierno de Macri responde a “un nuevo orden de organización social como es el neoliberalismo económico, cuyo objetivo es favorecer la concentración de riqueza en un sector determinado de la sociedad”. Sus principales medidas son los contratos individuales por sobre la ley y los convenios colectivos, quitar las horas extraordinarias, introducir el contrato intermitente en detrimento de la estabilidad laboral y reducir las indemnizaciones por despido. “Vienen por los trabajadores y los sindicatos”, aseguró”.
El proyecto de la Reforma Laboral que elaboró el Gobierno Nacional ya se encuentra en el Congreso Nacional para su tratamiento. Si bien se creía que el debate podría postergarse hasta el 2018, el presidente Mauricio Macri convocó a sesiones extraordinarias hasta el 31 de diciembre para no sólo discutir este tema, sino también el Presupuesto 2018, la reforma tributaria y el acuerdo fiscal.
En el marco de una charla debate organizada por el Movimiento Socialista de los Trabajadores de Trevelin, que se realizó el viernes pasado en la sede de la Junta Vecinal del barrio Unificado, el abogado laboralista Juan Rimoldi sostuvo que “la reforma laboral es un eslabón más de una serie de medidas que se están tomando para instaurar un nuevo orden de organización social como es el neoliberalismo económico, cuyas características principales son la desregularización de los mercados financieros, la reducción de las asignaciones sociales y la privatización de la industria y los servicios públicos”.
Baja del salario
Destacó en este sentido que “el objetivo es favorecer la concentración de riqueza en un sector determinado de la sociedad”, y planteó como ejemplo un informe del Centro de Investigación para la Formación de la República Argentina que señala que entre el 2015 y 2016 el salario cayó en su participación del Producto Bruto Interno del 37.4% al 34.3% de la ganancia que produce un país en un año. “La mayor cantidad de ese dinero fue a parar a los grupos económicos concentrados y en menor cantidad a los trabajados asalariados, por lo que la consecuencia es menor poder adquisitivo y menor calidad de vida”, explicó. En tanto indicó que los sectores beneficiados fueron el agro, la intermediación financiera, los servicios de electricidad, gas y agua, las minerías y las canteras.
Represión y desempleo
Rimoldi también expuso que la baja en la calidad de vida de los trabajadores genera tensiones sociales, que estallan en una fábrica cuando cierra o en la calle cuando la gente sale a reclamar por sus derechos. “Las herramientas para controlarlas son la represión de la protesta, generando heridos y hasta muertos; el desempleo como agente disciplinador donde siento temor a manifestarme por perder el empleo; y la colonización mental, mediante la cual los trabajadores creen que determinadas medidas, que van en contra de su intereses, son necesarias para poder estar mejor en algún momento”, enumeró.
Nuevas medidas
El abogado laboralista contó que “el proyecto de Reforma Laboral pretende que los contratos individuales que el trabajador celebre con su empleador tengan supremacía sobre la ley, los convenios colectivos de trabajo y el orden público laboral”. También informó que se quitará el pago de la hora extraordinaria por un banco de horas extras. “La jornada de trabajo actual prevé un máximo de 8 horas diarias y 48 horas semanales. Con el nuevo esquema se podrían establecer jornadas de hasta doce horas. No se pagarían las horas extras sino que se anotarían en un registro y a la semana siguiente se compensarían, ya que en vez de trabajar doce horas, podrían ser diez”, precisó.
Como otras medidas, manifestó que se introduce el contrato de trabajo intermitente, donde “el empleador tiene la posibilidad de llamar trabajadores para cumplir tareas determinadas por un plazo determinado, perdiéndose de esta manera la estabilidad laboral” y la figura del trabajador autónomo exclusivo.
Rimoldi explicó que el nuevo proyecto pretende modificar las indemnizaciones por despido, quitando del cálculo las horas extras, las comisiones y los premios, además de crear un fondo de cese laboral, en el que cada trabajador realizará un aporte de manera mensual para el día que sea despedido retirar de ahí su resarcimiento.
Seguidamente expresó que se incluirán las prácticas formativas, con carga semanal de 30 horas, seis horas de trabajo por día, donde el ingreso es no remunerativo y el empleador no realiza aportes para ese trabajador en formación. También planteó que “desaparece el principio de irrenunciabilidad, se reduce el plazo de prescripción a un año y se elimina la solidaridad en las subcontrataciones, es decir que la empresa no va a ser responsable por los accidentes de trabajo o enfermedades laborales de los trabajadores”.
El fin de los sindicatos
De esta manera Rimoldi señaló que “desaparecerán los sindicatos porque su poder son los convenios colectivos de trabajo y con esta reforma pasarán a ser letra muerta”. Asimismo desmintió que la Reforma Laboral tenga por objetivo fomentar el empleo al recordar que “Argentina tuvo dos procesos recientes de flexibilización, en los 90 y 2001 donde no sólo no se incrementó la cantidad de empleo sino que se destruyeron millones de fuentes laborales”.
En este sentido sostuvo que “vienen por los trabajadores y los sindicatos, así que la respuesta está en la organización y en el movimiento obrero y las organizaciones sociales en la calle”.
