El sistema sanitario nacional observó en estas semanas una disminución de la asistencia de pacientes – para la atención y control de diversas patologías – a hospitales y clínicas privadas a causa del temor de las personas a contraer COVID-19.

La información indica que las consultas totales por emergencias en centros médicos cayeron un 74 % en abril de 2020 respecto al mismo período del año anterior (2019). Cabe mencionar que los datos surgieron de una investigación realizada por la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina y de la Cámara de Entidades de Diagnóstico y Tratamiento Ambulatorio.  

Para conocer la situación del Hospital Zonal Esquel La Portada dialogó con la médica Patricia Laborde quien aseguró que la realidad del nosocomio local se corresponde con la información nacional destacando -en este sentido – el trabajo de los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) en el contexto sanitario actual. Confirmó, además, una mayor apertura de la atención en todos los CAPS, exceptuando los que fueron destinados a la atención de pacientes febriles con síntomas respiratorios.

“No hay una demanda importante de pacientes y eso nos preocupa. La gente cree que puede haber COVID y por ello no hace consultas. Si se hace mucha consulta en los CAPS”, manifestó.  

Demanda oculta

La directora asociada del Hospital indicó que “hay mucha demanda oculta. Hay pacientes que tienen enfermedades crónicas que deben controlarse y lamentablemente no están viniendo”. Y agregó que “si bien los agentes de salud en terreno se encargan de rastrearlos”, es complejo lograr la asistencia.

Para finalizar, Laborde, confirmó que “se abrieron todos los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS), pero los rojos siguen siendo rojos (Don Bosco y Badén). El resto fueron abiertos un poco más con redistribución de especialistas para una mejor atención de los pacientes crónicos y urgencias”.