A última hora del domingo Trevelin conocerá quién guiará los destinos de la Municipalidad a partir del 10 de diciembre próximo, y hasta el 2023.
Todo indica que el próximo intendente estaría entre Omar Aleuy (Chubut al Frente) y Héctor “Cano” Ingram (Frente Patriótico). Hay quienes también le ponen ficha al radical Tegid Evans que, según dicen, viene creciendo como opción.
Las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias dejaron algunas certezas y otros tantos interrogantes en el “Pueblo del Molino”.
¿Podrá Ingram conservar la diferencia? ¿Aleuy revertirá el resultado y repetirá en el Ejecutivo por cuatro años más? ¿Cuál será la performance final del radicalismo con Tegid Evans? ¿Habrá lugar para las sorpresas? Todas preguntas que tendrán respuesta cerrado el escrutinio, con los datos cargados en la página del Tribunal Electoral.
En el equipo del intendente hay un aura de optimismo. Dicen que en las generales mejorarán los guarismos.
Los motivos: Confían en que el acuerdo con Miguel Solís, precandidato del Frente Patriótico, traiga sus frutos. El ex combatiente de Malvinas logró unos 400 votos en el anterior turno. También esperan movilizar sectores partidarios que -entienden- en las PASO estuvieron tranquilos.
Estar en ejercicio del poder supone un “arma de doble filo”. Aleuy lo sabe bien. Tener el aparato del Estado permite llegar con soluciones concretas al vecino y, al mismo tiempo, deja expuesto al cachetazo de los reclamos, de esa necesidad a la que no se pudo dar respuesta.
Ingram también tuvo una campaña con bastante acción. En el entorno del concejal justicialista aseguran que ser los más votados en las Primarias no los relajó y que por el contrario lo asumieron como un doble desafío.
“Redoblamos los esfuerzos con recorridos en los parajes y barrios”, dijeron a este medio.
El peronismo está entusiasmado con recuperar la Intendencia de Trevelin, que perdieron en el 2015. No la tendrán fácil. Estos últimos días previos al 9 de junio serán más suaves en términos de visitas y despliegues en terreno. Sobrará el nerviosismo.
Tegid Evans, la carta de Cambiemos, quiere dar el gran golpe. Difícil pero no imposible, afirman en el Comité. “La política es el arte de lo posible”, die el viejo refrán.
Como en otros distritos de la provincia, y el país, el factor Macri juega en contra. Por eso la estrategia fue de asociación sólo con el candidato a gobernador, Gustavo Menna. Reuniones con vecinos e instituciones, sumado a mucha participación en redes sociales, la estrategia radical para llegar con chances al domingo.
Abbance hizo su presentación como propuesta electoral en estos comicios, con resultados que no fueron nada malos teniendo en cuenta que es la primera vez.
Juan Carlos Bravo es el candidato. Uno de los referentes de esta fuerza partidaria es el concejal Leandro Furque, que busca revalidar su banca. Encabeza la lista del cuerpo legislativo.
El joven Hernán Mondino es el candidato del MST. Buscará morder más votos y posicionarse como dirigente de cara al futuro.
Así las cosas, el “Pueblo del Molino” definirá al próximo jefe político de la ciudad. Nada está dicho, hasta que hable la ciudadanía, a través de las urnas.