El dirigente justicialista Ricardo Bestene planteó nuevamente la necesidad de discutir una “compensación económica justa” por el rol de la cuenca del Río Futaleufú en la generación de energía eléctrica. Precisó, además, que Esquel percibe sólo 15 mil dólares al año en concepto de regalías y tildó al intendente Sergio Ongarato de “incompetente” por restarle crédito al tema.

La renta hídrica es para Bestene la llave de acceso al desarrollo socioeconómico de la región cordillerana, la clave medular para que Esquel, Trevelin y Cholila den el salto y dejen de depender casi exclusivamente de la actividad del Estado. Conoce al dedillo lo que significa la matriz productiva compuesta por agua, electricidad  y aluminio.

El ex precandidato a intendente y ministro de Economía durante el gobierno provincial anterior recibió a diario La Portada en su oficina de calle Roca. Su escritorio estaba lleno de documentación, números, porcentajes, informes y balances. “Esto lo vengo estudiando hace mucho tiempo”, dice con una sonrisa, segundos antes de comenzar la larga entrevista.

“Somos una comunidad económicamente empobrecida pero rodeada de poderosos recursos naturales”, sentenció de entrada y aclaró que una cosa la localidad tiene en claro: no quiere la minería. De inmediato dijo que las ciudades de la cuenca del Río Futaleufú “no percibieron el poder económico del agua”.

Llamó a pelear  por “una compensación económica justa y equitativa” en función del aporte realizado a través de la represa. Entendió que así como Comodoro Rivadavia -con sus autoridades municipales a la cabeza- peleó hace un par de años por la implementación de un marco regulatorio para el petróleo, Esquel debería encargarse de lo mismo.

Consideró que si la dirigencia política local se pone firme al frente del reclamo podría lograrse una participación “fabulosa” en beneficio de toda la población. Contó, asimismo, que el agua transformada en electricidad y ésta en aluminio encarna la segunda matriz productiva en importancia dentro de la provincia, detrás de la poderosa industria petrolera.

Detalló Bestene que el grupo económico en el proceso está conformada por: Aluar (produce el producto terminado, aluminio), Infa (presta servicios industriales), Hidroeléctrica Futaleufú (genera la electricidad para la planta en Puerto Madryn), Transpa (transporta la electricidad de una punta a otra de la provincia) y Trelpa.

Precisó que, según el balance al 31 de junio del 2017, el conjunto de las cinco empresas facturaron el año pasado cerca de 16.500 millones de pesos y que de ese monto Esquel recibió 298 mil pesos.   “Es una chirola llamada regalía”, enfatizó, indicando que aún “no terminamos de entender cómo funciona esto de la matriz productiva: agua, electricidad y aluminio”.

Señaló que Aluar consume el 35 % de la energía generada por la Hidroeléctrica Futaleufú. Son 6,4 millones megavatios hora por año. 2,1 millones los aportó el complejo ubicado a unos pocos kilómetros de la ciudad. El resto un parque térmico en Puerto Madryn y Cammesa a través del sistema nacional interconectado.

Bono de compensación

Reiteró que “la compensación económica por el uso del agua” es central y aseveró que el 1 % de las ventas del ejercicio anual 2017 del grupo económico suponen la mitad del presupuesto municipal. En ese contexto, pidió que el intendente se siente a negociar ante quien corresponda, en este caso la familia Madanes Quintanilla que participa con el 72 % del capital social.

Apostó por una distribución equitativa de las ganancias netas e instó a debatir un marco legal que establezca “una compensación justa por lo que aportamos” desde la cuenca del Río Futaleufú. “Tenemos mucho por ganar”, recalcó y celebró que de a poco la comunidad va tomando conciencia y demuestra interés por la temática.

Subrayó que una renegociación adecuada -antes del 2025 que finaliza la concesión del complejo hidroeléctrico- permitirá al municipio contar con un flujo de recursos constantes para el desarrollo de infraestructura de todo tipo. Y apuntó contra Ongarato: “Tenemos un intendente con una conducta incompetente respecto al tema”.

“Más temprano que tarde la sociedad pedirá que resuelva.  Ongarato no se involucra por falta de capacidad. No tiene conducción política ni rumbo económico. Ironizar con la renta hídrica es ser mediocre”, completó.