Sólo en seis meses, la dependencia policial registra en Esquel unas 118 denuncias penales por violencia familiar y más de 50 que no encuadran como delito. Lesiones, abuso sexual, amenazas y daños, los casos más recurrentes.
A pesar de la incesante lucha que se viene dando a nivel internacional y la exposición que tiene el tema en los medios de comunicación, la violencia de género es una problemática social en ascenso. Todas las semanas escuchamos perplejos sobre la muerte violenta de alguna mujer. El índice de femicidio en la Argentina es alto.
Diario La Portada conversó con la Oficial Principal Cintia Gallegos -Comisaría de la Mujer- quien aportó cifras: 118 denuncias penales hoy en curso dentro de la Justicia. Las estadísticas refieren al primer semestre del año. Hay que sumar también más de 50 intervenciones sobre situaciones que no llegan a configurarse como delitos.
Mencionó la funcionaria policial que el abuso sexual, amenazas, lesiones y daños son las principales causas de las denuncias que finalizan en manos del Ministerio Público Fiscal (MPF), mientras que aquellos escenarios donde no existe un delito tipificado penalmente son derivados a la órbita de Familia.
Dijo que “se vienen atendiendo casos puntuales de violencia familiar, la cual es provocada hacia la mujer o los niños, y en el abuso sexual sea en el ámbito intrafamiliar o bien en la vía pública. El nivel de denuncias corresponde al volumen de habitantes que tenemos (en la ciudad y alrededores). Lo ideal, claro, sería que no existan”.
Comentó que la Comisaría de la Mujer, dependiente de la Dirección de Seguridad, “trabaja con todo lo que abarca al vínculo familiar hasta tercer grado de consanguineidad”. Recordó, asimismo, que funcionan en calle Libertad 1009, barrio Malvinas Argentinas. El teléfono de servicio disponible las 24 horas es el 2945 521947 o el fijo 450952.
Por más concientización social
Por otro lado, explicó que a lo largo del año brindan charlas en establecimientos educativos e instituciones con el objetivo de concientizar a la población sobre esta problemática de la violencia familiar. “Hay poco requerimiento”, lamentó la Oficial Principal Gallegos, dejando en claro que le gustaría una presencia más regular en las escuelas, por ejemplo.
