Padre ‘Paco’ Olveira: “El acceso a los servicios tiene que ser un derecho humano real”

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El Padre Francisco “Paco” Olveira, integrante del Grupo de Curas en Opción por los Pobres, estuvo en Esquel la semana pasada y, entre otras actividades, brindó una charla abierta sobre “El acceso a la energía como derecho humano”. La llegada de Olveira fue impulsada por el Instituto Futaleufú.

Luego de esa actividad, el Padre visitó la redacción del Diario La Portada y habló de cómo analiza el contexto actual en cuanto al acceso a los servicios. Consideró que “el acceso a la energía, el agua y la electricidad tiene que ser un derecho humano real”. No obstante, cuestionó que “en estos momentos todo es una mercancía, hasta el Ministerio de Desarrollo se convirtió en Capital Humano”.

Olveira, que trabaja en el partido de Merlo, destacó que del diálogo con distintos vecinos de la región pudo anoticiarse de muchas realidades particulares, pero que no son tan distintas a otras partes del país. “En las zonas rurales tienen un muy difícil acceso al agua y es una realidad que nosotros en el Gran Buenos Aires también tenemos. El que no tiene plata no puede hacer una perforación y no tiene agua”, detalló.

“En el barrio Ceferino es prácticamente la misma realidad, solo que acá con más frío y montaña. Allá con muchísimo barro y muy lejos de todo servicio público, pero realidades a veces bastante parecidas, lo cual entristece”, indicó.

Desde su punto de vista, estos servicios “no tendrían que estar privatizados”, aunque lamentó que “en estos momentos con un presidente que dice que el Estado es una organización criminal, estamos en las antípodas”. “Hay una miseria planificada”, opinó el integrante de Opción por los Pobres.  

De todos modos, aclaró que siendo del Estado “tampoco es una garantía total”, por lo que debe existir “una manera de control popular”. “Aysa ahora es pública, sin embargo, pero nos comunicaron una suba de $7.000 a $30.000 pesos en nuestra factura”, argumentó.

Subrayó que además el gobierno nacional eliminó la posibilidad de que las organizaciones comunitarias puedan pedir una tarifa diferenciada en el servicio eléctrico.  “La ley está vigente y las autoridades tendrían que estar en el ente regulador de la energía eléctrica, pero no fueron nombradas, con lo cual todos los expedientes están parados”, puntualizó.

El sacerdote aseguró que “es la lógica de este gobierno cortar todo lo que beneficie a los sectores populares y a las organizaciones sociales”.

Asimismo, si bien dejó en claro que “no puedo decir una palabra de la de acá” porque no conoce en detalle su funcionamiento, destacó que, aunque las Cooperativas son empresas, deberían tener “otra mirada de las cosas”, desde su concepción, para prestar los servicios.

“El tema es que muchas cooperativas tienen el nombre, pero funcionan descaradamente como una empresa privada, cuyo único objetivo es el afán de lucro”, indicó.

Visita a Nahuelpan

En una de sus actividades en la región, el Padre Paco Olveira visitó a la Comunidad Nahuelpan. Sobre esto, destacó que el museo “está muy bien hecho”, aunque no pudo escapar a la experiencia sobrecogedora de “ver el sufrimiento” de los pueblos originarios.

En su caso, reveló que lo interpela de manera particular: “Yo soy español de nacimiento, argentino nacionalizado y sacerdote, sé que fuimos causantes de mucho de ese dolor”. “Animaba verlos hablando no solo del pasado, sino del presente y del futuro. Dolor, pero mucha esperanza de un pueblo que la sigue luchando”, recalcó.

“Muchísima impotencia”

Por otro lado, señaló que la situación actual “es muy difícil” para las organizaciones sociales y la población con la que trabajan: “Últimamente siento muchísima impotencia”. “Yo vivo con el sector que nunca sale de la pobreza, ni en los mejores tiempos que para mí fueron los de Néstor (Kirchner) y Cristina (Fernández). Igual ahí vivía con ese 20 o 25% de pobreza”, consideró.

Sin embargo, dijo que “había una serie de políticas que mejoraban la vida de la gente y algunas hoy siguen estando, como la Asignación Universal por Hijo, aunque con cada vez menos poder adquisitivo. Estas políticas no siguen el camino de un aumento que vaya contra la inflación”.

El dirigente social aseveró que “hoy no tenemos ninguna a favor de los más pobres”: “Estoy esperando la mano invisible del mercado que nos ayude en el invierno”. Subrayó que perdieron el Plan Abrigar “que era un dinero que recibíamos las organizaciones para comprar una serie de insumos, como frazadas, colchones, y garrafas, que por supuesto se rendía”.

En este escenario, apelan a la solidaridad: “Siempre es necesaria para estos tiempos, pero no sustituye al Estado. Vamos haciendo lo que se puede”.

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