El sostenido incremento de casos de Coronavirus que se registra en el país, como en muchos otros del mundo, preocupa a las autoridades sanitarias quienes recuerdan en forma constante las medidas de prevención como así también completar el esquema de vacunación con segundas y dosis de refuerzo.
Pese a esta preocupante situación epidemiológica la realidad de la pandemia marca diferencias con los inicios de 2020. Es que la campaña de vacunación fue puesta en marcha y muchos adhieren a ella porque consideran que es la mejor forma de que en caso de contraer el virus el impacto de la enfermedad será mucho menor.
No obstante también están quienes prefieren no vacunarse y quienes sólo lo hacen porque es un requerimiento del lugar de trabajo. El derecho de decidir es garantizado más allá del debate de si esta postura es correcta o no. También es justo decir, porque así lo señalan las autoridades de salud, que los vacunados ingresaron en una “etapa de relajación” respecto de las medidas de prevención lo cual no deja de ser contraproducente.
El contexto se modificó a casi dos años de iniciada la pandemia y así lo demuestra la decisión adoptada en la jornada de ayer por los ministros de salud de todo el país. La información indica que las personas que sean contacto estrecho de casos positivos de Coronavirus, que estén asintomáticas y tengan su esquema completo de vacunación con el refuerzo aplicado hace menos de 4 meses podrán ser exceptuadas del aislamiento. Los no vacunados deberán cumplir estrictamente con el confinamiento, según resolvió el Consejo Federal de Salud en una reunión que se llevara a cabo el pasado martes.
La ministra de Salud, Carla Vizzotti, aseguró recientemente que las personas con esquema primario completo hace menos de 4 meses y aquellas que tuvieron Covid-19 en los últimos 90 días podrán “tener más flexibilidad en el aislamiento, en caso de ser contacto estrecho y no tener síntomas de la enfermedad, y se les recomendará la realización de un test entre el tercer y quinto día para definir su condición.
La pandemia cambia con el paso del tiempo y las medidas dispuestas desde el área de salud también. Lo que no debe cambiar es la conciencia personal sobre las medidas de prevención lo cual redundará en el beneficio comunitario.
