Docentes anunciaron un paro virtual desde el lunes hasta el viernes en reclamo del pago de los haberes adeudados y el medio aguinaldo, inversión en edificios escolares y convocatoria a paritaria 2020. También advierten que es inviable el protocolo del posible regreso a la presencialidad y alertaron sobre la falta de garantías de los decretos de jubilación de oficio, débito laboral y retiro voluntario.
El secretario general de la Regional Oeste de ATECh, Martín Pena, manifestó a La Portada que los trabajadores de la educación se encuentran con medidas de fuerza desde el lunes hasta el viernes por resolución del Consejo Directivo conformado por las seis regionales. “El paro se enmarca dentro de la virtualidad porque es la realidad que nos impone la pandemia, donde no hay una presencialidad en las escuelas”, explicó.
También repudió la intención del gobierno provincial, a través del Ministerio de Educación, de tomar asistencia para saber quién está de paro y quién no. “Hay lugares donde no hay ni siquiera internet, conectividad, y es por eso que los compañeros tienen distintas alternativas y formatos de trabajo, llevando cuadernillos o buscando las tareas un par de días después. Por eso nosotros decimos que es ridículo e inaplicable”, remarcó.
Asimismo Pena recordó que “seguimos con los reclamos de siempre, dos meses de atraso salarial y las escuelas fuera de servicio porque si bien algunas acciones se van viendo esporádicamente, son mínimas y hoy no se podrían poner en marcha”. De esta manera enfatizó que “todavía no están las condiciones dadas para un regreso, tal como en algún momento lo expresó la ministra de Educación”.
En este sentido el dirigente sindical hizo referencia al protocolo establecido a nivel nacional y al cual deben adecuarse las provincias. “Se conformó el Consejo Asesor, donde exigimos ser parte, porque no se nos quería tener en cuenta, y pusimos la realidad sobre la mesa porque el Ministerio de Educación plantea que todo está bien cuando tenés casi el 70% de las escuelas imposibilitadas de habilitar en lo que sería la vieja normalidad”, dijo. Mientras que sostuvo que sería mucho menos posible en el contexto actual donde se debe cumplir con todas las medidas de bioseguridad. “Una escuela, que ocupa casi una manzana, tiene una partida de 12 mil pesos por trimestre para limpiar así que no tendría cómo comprar toda la lavandina, el alcohol en gel y las alfombras sanitizantes que necesitan. Todas esas cuestiones en lo ideal están bien pero en lo real no existen”, apuntó.
Pena planteó que “si hoy se quisiera volver a las clases no se podría por el estado de los edificios y lo salarial”, y destacó que el Ministerio de la Educación de la provincia haya recapacitado en ese sentido. “La misma ministra dijo que no estaban las condiciones para iniciar nada así que ponerle una fecha hoy es un poco arriesgado, dado que en países donde hace mucho más tiempo que nosotros tienen el COVID-19 todavía no pueden decir cuando termina esto. Es una complicación que se pueda establecer una fecha, poniendo en riesgo la salud de los trabajadores y los estudiantes”, expuso.
Con respecto a las jubilaciones, Pena explicó que “nosotros le planteamos a los trabajadores que quienes estén en condiciones de jubilarse en nuestra repartición tienen que tener 25 años de aporte y 53 años como mínimo de edad”. Sin embargo alertaron sobre el débito laboral y el retiro voluntario. “Te proponen quedarte en tu casa, pagarte un proporcional y descontarte la jubilación para que de acá a 5 años puedas jubilarte pero la verdad es que este gobierno no puede garantizar nada de acá a mañana, mucho menos de acá a 5 años”, dijo.
Por este motivo Pena advirtió que “no hay ninguna certeza de que eso vaya a ser cierto y por eso aconsejamos no tomar ese camino como tampoco el retiro voluntario, que ya pasó en los 90 con Carlos Menem donde muchos compañeros tomaron este camino y quedaron sin jubilación, obra social y en la calle”.
Por último, el dirigente sindical señaló que el gobierno provincial “entregó todos los recursos de la provincia a manos extranjeras, lo único que se les ocurre es endeudarse y seguir achicando a los trabajadores y trabajadoras, pero eso no podemos aceptarlo de ninguna manera. Le decimos a los trabajadores que continúen en sus puestos de trabajo, no sobra ningún trabajador en el Estado, al contrario faltan, y la solución no es seguir achicando para dentro sino ver adónde se está yendo la plata”.