El Club de Arquería Andino Patagónico, que ya lleva cuatro años de vida y un gran número de socios entre hombres y mujeres de todas las edades, inició en marzo con sus actividades. La institución no sólo apunta a lo deportivo y la capacitación, sino al encuentro familiar, social y recreativo que es lo que dio su origen. 

Un grupo de amigos y entusiastas que practicaba esta disciplina se juntó en 2012 con el fin de desarrollarla en la ciudad y así fue que nació el Club de Arquería Andino Patagónico, que recién obtuvo su personería jurídica el 14 de mayo de 2014.

Las primeras prácticas se realizaron en el predio que tiene el Club de Tiro “Los Caiquenes” en Laguna La Zeta y hoy se encuentran desarrollando sus actividades de la escuelita, el curso de iniciación y las tiradas libres en la Escuela N° 112. Asimismo la Sociedad Rural le brindó un espacio en el salón y un terreno cerca del hipódromo, como también la Municipalidad de Esquel le cedió unas hectáreas fuera de la Reserva Natural de La Zeta para que puedan tirar. Sin embargo es un proyecto pendiente contar con su propio espacio físico para tener una continuidad en el invierno y más tiempo de entrenamiento.

El presidente del CAAP, Rubén Fuentes, aseguró a La Portada que “nuestro trabajo y la intención de generar una nueva disciplina en la ciudad nos abrió las puertas ante la comunidad y por eso recibimos la ayuda de la Escuela 112, la Sociedad Rural y el municipio. Además recibimos el apoyo de la Federación Argentina de Tiro con Arco (FATARCO) y en esa línea trabajamos como club”.

Categorías

El Club cuenta con todas las categorías a excepción de una que ha quedado desierta por el momento como es Long Bow. Al respecto, Román Campos, quien es uno de los instructores del CAAP, explicó que “las categorías se dividen por edades en los más chicos, pero sobre todo por el tipo de arco que se usa, entonces un nene avanzado se puede encontrar con una persona adulta y competir en la misma categoría, como también varones y mujeres”. De todos modos contó que existen las categorías cadetes, juveniles y adultos.

Asimismo precisó que en el club “brindamos una capacitación en lo que es el tiro con arco recurvo para la iniciación de nenes y adultos ya que es lo básico para que el arquero después decida si quiere ir a otro tipo de arco”.

La institución cuenta con socios federados, que son los arqueros que participan de torneos nacionales, y con los socios que participan de las distintas actividades que se brindan en el club para efectuar el tiro. “Tenemos veinte federados que se han inscripto para participar de competencias oficiales y treinta socios que no practican la arquería con esa formalidad pero siempre están y hacen una arquería más social, recreativa y no tan deportiva como la encaran los otros”, destacó Román.

 

Actividades 

La Escuelita inició en marzo con sus actividades que se llevan a cabo los días martes y jueves de 19 a 20.30 horas en la Escuela N° 112. Hoy son quince los chicos que se encuentran asistiendo a las clases y todavía hay tiempo de inscribirse. Hasta el año pasado participaban chicos desde los 5 años pero este año será a partir de los 10 por falta de profesores. No hace falta llevar arco ya que el club cuenta con el equipamiento necesario para desarrollar los programas que tiene en marcha, como el curso de iniciación y las tiradas libres.

Espacio de encuentro

El presidente del Club destacó que la arquería no tiene límites de edad. “Hoy tenemos abuelos y nietos en el club, así que el disfrute de esta actividad es de los dos y logramos lo que nos propusimos en un principio: ser una institución familiar, social y recreativa que difunda la disciplina en la ciudad”, expresó. A su vez planteó que “una entidad que desarrolla una actividad se mide por los logros, que pueden ser deportivos y sociales; nosotros intentamos caminar sobre ambos”.

En lo personal, Román sostuvo que la arquería trasciende lo meramente deportivo. “Te permite encontrarte con uno mismo, es muy completa, y es diferente a cualquier otra disciplina porque en una misma línea se pueden encontrar un abuelo y un nieto”, aseguró. Por eso hizo hincapié en que la institución brinda un espacio de encuentro donde la gente además de desarrollar una disciplina pueda vincularse socialmente con otras personas.