Los intendentes de Esquel y Trevelin, Sergio Ongarato y Omar Aleuy, se reunieron este viernes para analizar el funcionamiento de la Planta de Tratamientos de Residuos Sólidos Urbanos (PTRSU). Acordaron “trabajar en conjunto” para optimizar el recurso y evitar grandes pérdidas económicas para ambos municipios.
Tras días tensos, donde hubo declaraciones fuertes y ruidosas en ambas localidades por la gestión de los residuos, finalmente Aleuy y Ongarato se sentaron en una misma mesa para discutir detalles sobre la administración de la planta ubicada a unos kilómetros del aeropuerto, a la vera de la Ruta 40.
El intendente de Trevelin celebró que luego de algunas idas y vueltas “pudimos empezar a trabajar en el problema del GIRSU”. Dijo asimismo que el próximo paso, al menos en el “Pueblo del Molino”, será establecer con claridad el costo que genera el servicio para las finanzas municipales.
Adelantó que tienen en mente un proyecto para levantar una planta de transferencia propia y aclaró que mientras tanto “nuestros residuos se irán pesando todos los días. A fin de mes vamos a sacar el valor de lo que hemos traído desde Trevelin y se descontará de lo que estamos aportando con los empleados y el camión”.
Dejó en claro que la idea es “trabajar en conjunto” y señaló que bajo ningún concepto pretenden mantener una deuda con Esquel por el tratamiento de la basura. “Vamos a arreglar todos los meses. Vamos a ser un contribuyente más y pagaremos por el volumen de residuos que originemos”, reiteró.
Aleuy precisó que el municipio de Trevelin aporta alrededor de 200 mil pesos con los empleados y la unidad móvil. “Eso lo vamos a descontar a fin de mes de la facturación que la Municipalidad de Esquel nos haga”, indicó. Añadió luego que las pérdidas de la localidad por el GIRSU trepan a los 400 mil pesos al mes.