La decisión del Gobierno de cerrar la unidad especial de la CONADI (Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad) que investiga la desaparición de niños y niñas durante la última dictadura militar generó una nueva polémica y el repudio inmediato de organismos de derechos humanos. En Esquel, la Red por la Identidad se alzó contra la gestión de Javier Milei y advirtió que “buscan borrar la memoria del pasado reciente de Argentina”.
Hace algunos días, el Ministerio de Justicia de la Nación anunciaba el cierre de la mencionada unidad especial, dependiente de la CONADI. “Este Gobierno respeta la división de poderes y vela por la protección irrestricta de los derechos fundamentales: la vida, la libertad y la propiedad privada. Por lo tanto, la existencia de este organismo es incompatible con la Constitución Nacional”, rezaba el escueto comunicado.
Desde luego, la noticia no pasó desapercibida. La Red por la Identidad dijo lo suyo: “Buscan borrar la memoria del pasado reciente de Argentina, cercenando la posibilidad de acceder a derechos elementales como la identidad y la justicia. El cierre de la Unidad Especial, la complicidad con los diputados que visitaron genocidas, el desmantelamiento de sitios de memoria, son parte de una misma política”.
La organización que trabaja hace años en la ciudad planteó que el Gobierno “debe tomar medidas para preservar la memoria y promover la justicia, en lugar de intentar borrar el pasado. En Argentina, la memoria, la verdad y la justicia son y deben seguir siendo una política de Estado, sin colores partidarios. Seguiremos luchando para que la verdad prevalezca y la memoria de las víctimas sea respetada y que los nietos apropiados puedan conocer su verdadera identidad.”
Un poco de historia
De visita en la redacción de diario La Portada, Graciela Rojana, una de las referentes locales de la Red, recordó que con el retorno de la democracia el gobierno liderado por Raúl Alfonsín crea el banco nacional de datos genéticos. Ya en la gestión de Carlos Menem nace la CONADI y con la reforma constitucional del 94 el país adhiere a declaraciones internacionales sobre el derecho a la identidad. Esto en paralelo al trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo.
Explicó además que bajo el gobierno de Néstor Kirchner aparece la unidad especial encargada de investigar la desaparición de niños y niñas durante la última dictadura militar. Eso ocurre en el 2004. En limpio, señaló que más allá de las banderías y colores políticos “todos los gobiernos (desde el retorno de la democracia) estuvieron comprometidos” con la temática, en mayor o menor medida.
Indicó que dicha unidad especial es una herramienta cuya función es colaborar con la Justicia. “Nosotros como Red por la Identidad elevábamos a Abuelas de Plaza de Mayo y a la CONADI todo lo que nos presentaba la gente como denuncias o sospechas”, comentó, ponderando que ese sistema “ayudaba a armar el rompecabezas de la identidad de la persona. La CONADI es un instrumento del Estado”.
Rojana precisó que la propia Comisión, con documentación en mano, se encargaba de hacer la presentación ante los organismos de la Justicia, institución esta última que “determinaba si la persona en cuestión tenía que practicarse el ADN” e impartía las medidas correspondientes a los efectos de constatar la identidad. Bajo este esquema aparecieron muchos nietos apropiados durante el proceso.
El derecho a la identidad
“Todos tenemos el derecho a la identidad”, expresó en la entrevista con La Portada y resaltó que detrás de ese logro hay décadas de lucha como las que lleva Abuelas de Plaza de Mayo hace más de 40 años. “No se puede borrar todo de un plumazo como pretenden hacer. Lo que el gobierno ha hecho no tiene sustento”, planteó preocupada y consideró que la Administración Milei pareciera estar empeñada en “reprogramar la cabeza de los argentinos”.
La referente de la Red por la Identidad subrayó que en la sociedad hay innumerables grupos de resistencia que tienen la fuerza para plantarse ante las políticas de olvido. “Los derechos humanos no pertenecen a ningún partido político. Gobiernos de distintas banderas partidarias dieron la posibilidad a Abuelas de encontrar a los nietos. La Argentina tiene una estructura para la búsqueda de la identidad”, señaló.
“Nosotros somos un vehículo para que la gente encuentre su identidad, nada menos”, enfatizó y reiteró que en la Red solo reciben las denuncias y testimonios. Al mismo tiempo, sostuvo que no se puede bajar los brazos porque todavía está “la posibilidad de encontrar a más nietos. Por eso acá estamos. No hemos cambiado el objetivo más allá del gobierno de turno, de las embestidas contra la memoria y la búsqueda de justicia”.