El presidente de la Junta Vecinal del Estación, Carlos Molina, se mostró muy preocupado por la falta de obras en el barrio y por el futuro de los jóvenes. Reclamó al municipio por el incumplimiento del adoquinado de cinco calles, lo que permitiría la circulación del transporte público; el mantenimiento de los espacios públicos y la terminación de un galpón para brindar talleres.
El balance del año 2018 no es bueno para los vecinos del barrio Estación. El vecinalista Carlos “Botita” Molina presentó varios proyectos al municipio pero no pudo concretar ninguno. No hubo respuestas. Sólo compromisos. “Nosotros presentamos un proyecto para adoquinar las calles del barrio que se conectan con los barrios Bella Vista y Winter, lo que permitiría que pueda subir el transporte público”, contó Molina a La Portada.
Agregó en este sentido que desde la Secretaría de Obras Públicas se comprometieron a avanzar con esta obra y hasta le hablaron de pavimento. “Hicieron el anuncio de que lo iban a hacer pero todavía no empezaron”, comentó y destacó que esto permitiría que se corte el tránsito los días sábados que hay feria en la Don Bosco.
Asimismo señaló que el intendente Sergio Ongarato se había comprometido a alambrar la canchita de fútbol para que la pelota no caiga más en las casas de los vecinos. “Está todo muy deprimente y derrumbado. El Estado no está presente en el barrio y nos sentimos bastante abandonados. El municipio promete pero no cumple”, expresó.
Jóvenes sin futuro
Otra de las grandes preocupaciones del vecinalista es la falta de trabajo y el futuro de los jóvenes del barrio. La Junta Vecinal había firmado un convenio con el municipio para terminar con la construcción de un galpón en la sede que permitiera la realización de talleres de carpintería y soldadura para los vecinos. “A los chicos les hicieron hacer el monotributo porque iban a empezar en noviembre y quedó todo en la nada. Es vergonzoso porque no se les puede hacer gastar plata a los chicos y dejarlos abandonados. No sabemos qué pasó”, planteó.
También contó que se encuentra pendiente la entrega de las canchas para el barrio que serían un espacio muy importante de contención para los niños y jóvenes. “Hoy no contamos con espacios ni actividades para los chicos. Tuvimos muchos talleres pero ya cerraron. Necesitamos escuelas de fútbol y de otros deportes para brindar una mayor contención a los jóvenes”, remarcó.
Faltan recursos
Molina, quien hoy se encuentra desocupado, se manifestó desanimado ante la falta de trabajo en la ciudad y la falta de oportunidades. “Vemos que todo está mal porque no proponen nada, no generan trabajo y tenemos emprendimientos pero no los podemos concretar porque faltan recursos”, sostuvo.
Resaltó además que los jóvenes del barrio “están mal porque con el galpón algunos podían tener un taller, no era una solución pero los iba ayudar”. Sin embargo expuso que “no hay respuestas y nos encontramos que tenemos que rogar mucho”.
De todos modos valoró la incorporación de Horacio Quinteros a Acción Social ya que aseguró que “se ve otra impronta”. Y agregó que “esperemos que podamos trabajar en forma coordinada y que apoye los emprendimientos porque la gente quiere hacer cosas pero faltan recursos”.
Por otro lado criticó la falta de participación de los vecinos y pidió que se acerquen más a la sede vecinal con propuestas. Lamentó que este año no se pudiera organizar alguna actividad para Reyes Magos por falta de fondos y opinó que este tipo de fechas deberían estar contempladas en el presupuesto municipal. “Anímicamente me siento muy mal porque no tenemos una respuesta acorde a nuestros jóvenes y vemos que hay un abandono total. Ojala que el 2019 sea mejor y que se empiecen a concretar los proyectos”, cerró.
