Tres mil vecinos de Esquel están inscriptos en el Instituto Provincial de la Vivienda a la espera de su casa propia y son mil los adjudicatarios morosos que deberían regularizar su situación, lo que permitiría avanzar en la construcción de viviendas sociales que hoy es la mayor necesidad. Desde la Delegación Zonal aseguran que hubo un cambio de paradigma a nivel nacional sobre esto y que habrá que reinventarse para brindar soluciones habitacionales. Actualmente se encuentran en ejecución 72 casas en Valle Chico.
El delegado zonal del Instituto Provincial de la Vivienda, Daniel Iribarren, confirmó a La Portada que próximamente se estarán entregando ocho viviendas tuteladas en el barrio 28 de Junio. “Los trabajos están avanzando muy despacio hasta tanto podamos regularizar los pagos a la empresa constructora pero una vez que esto se concrete seguramente estarán listas en veinte días”, anunció. Asimismo explicó que las casas serán entregadas a personas mayores y que se encuentran conversando con la Municipalidad de Esquel para que realice el manejo del mantenimiento y el control de las mismas. Sólo faltaría colocar artefactos sanitarios y de gas –envasado- que no lo han hecho por un tema de seguridad.
Con respecto al tercer plan de viviendas de Siprosalud en la ciudad, informó que “se complicó en tanto y en cuanto la Secretaría de Vivienda de la Nación ha cambiado los programas y ahora está impulsando las Asociaciones Públicas y Privadas por lo cual el pedido de financiamiento que la Asociación de Empleados de la Salud le hace al IPV no puede prosperar en los mismos términos que habíamos hecho los dos barrios anteriores”. De todos modos sostuvo que se encuentran en conversaciones para ver si se puede adecuar este barrio al nuevo programa. Las viviendas estarían ubicadas al lado del Centro de Encuentro en el barrio Baden.
Adjudicatarios morosos
Iribarren también contó que se llevará a cabo una nueva operación de notificaciones a los adjudicatarios morosos para que se acerquen a regularizar su situación ya que se encuentran impulsando el recupero de las cuotas, con el fin de tener mayor cantidad de recursos para continuar construyendo viviendas de tipo social, que es donde advierten que tendrán problemas. “Tenemos un déficit en este sentido, dinero va a haber pero para las Asociaciones Públicas y Privadas y menos para viviendas sociales”, reflexionó.
Recordó que el año pasado se hizo una convocatoria sobre mil adjudicatarios morosos, a la cual asistieron setecientos y sólo la mitad regularizó su situación, quedando un 30 por ciento afuera. Por eso ahora volverán a ser notificados uno por uno desde Rawson para ver cuál es el resultado.
Inscriptos y obras en ejecución
Son tres mil los inscriptos de Esquel en el IPV y cinco mil en la región, que abarca hasta El Hoyo y parte de la meseta; son veintiún localidades en total. En la actualidad se encuentran ejecutando 72 viviendas en Valle Chico y tienen un proyecto presentado ante Nación a la espera de su factibilidad por 36 más en esta zona. “Tenemos un loteo grande, que corresponde al plan “Techo digno”, que ya no existe más, y son viviendas de tipo social que se están construyendo, en mayor parte, con fondos provinciales. Hicimos la infraestructura completa y en este momento somos los únicos que estamos construyendo ahí”, destacó.
Con respecto a la construcción de viviendas sociales y la necesidad habitacional que hay en la ciudad, Iribarren sostuvo que “la situación está bastante complicada en tanto y en cuanto el gobierno nacional ha cambiado paradigmas y su concepción de la vivienda social no es la misma que existía hace poco o la que tiene el gobierno de la provincia”. Por lo tanto señaló que “no queda más remedio que tratar de readecuarnos y reinventarnos para ver si podemos continuar con la idea de construir viviendas sociales”, sobre todo también por la crisis que no sólo padece Chubut sino el país en general.
Seguidamente informó que los requisitos para anotarse continúan siendo los mismos pero que hay una diferenciación respecto de los ingresos de la familia. “Para aspirar a una vivienda social, la familiar deberá ingresos económicos menores a dos sueldos mínimos, vital y móviles, y los que tengan ingresos superiores deberán aspirar a un crédito hipotecario indexado”, explicó.