Los trabajadores de la Subsecretaria de Agricultura Familiar, con diversas modalidades, resisten el cierre de sus oficinas en Esquel lo cual está previsto para fines de marzo desplazándolos a otras reparticiones estatales.
Belén Coussirat, delegada de ATE en la Subsecretaria, aseguró que “la situación cada vez se agrava más” a raíz “del vaciamiento que venimos sufriendo desde hace años: nos hemos quedado sin vehículos para llegar al territorio, sin directivas de trabajo y sin presupuesto”. Destacó, además, que “a todo esto se suma que el 31 de marzo nos quedamos sin edificio después de 25 años de estar en la Cordillera”. Y agregó que “esto no solo significa que no vamos a tener un espacio físico donde reportarnos, sino que los agricultores no tendrán donde gestionar”. “Lo que busca el Gobierno Nacional y la Coordinación Provincial es que queden desatendidos los productores familiares de la Cordillera, Mesa y Costa del Chubut”, expresó.