Lo aseguró la Oficial Principal Viviana Quiñaneo Jefa de la Policía Comunitaria de Esquel quien, además, destacó el trabajo en red que se realiza con presidentes de Juntas Vecinales y diversas instituciones de la comunidad. Señaló que el mayor requerimiento de intervenciones tiene lugar durante los fines de semana como consecuencia del “mayor consumo de alcohol”.
Las discusiones entre vecinos y los conflictos domésticos de diversa índole requieren de un trato especial por parte de quienes deben hacer cumplir el orden. Para resolver estas situaciones, casi siempre complejas y con una elevada carga emotiva, se cuenta con la ayuda del personal que cumple funciones en la Policía Comunitaria.
Con una formación diferente y un intenso trabajo en terreno los policías de la dependencia intentan ayudar a los vecinos y crean un vínculo especial donde la confianza constituye un verdadero valor.
Del trabajo cotidiano y del vínculo creado con la comunidad, entre otros temas, La Portada dialogó con la Oficial Principal Viviana Quiñenao Jefa de la Policía Comunitaria de Esquel.
La Portada: ¿Cuál es el trabajo habitual que realiza Policía Comunitaria?
Viviana Quiñenao: Nuestro trabajo está enfocado a los menores, a quienes tienen sus derechos vulnerados, adultos mayores y a resolver conflictos entre vecinos en relación a medianeras o animales sueltos. Los llamados son derivados desde las Comisarias o bien desde el 101. También está la gente que ya conoce nuestra función y se acerca directamente a pedir ayuda o buscar asesoramiento.
L.P: En el marco del trabajo cotidiano ¿intervienen en casos de violencia de género o situaciones generadas por consumo de alcohol?
V.Q: Sí, y trabajamos en forma conjunta con Comisaría de la Mujer por unificación de la Institución ya que dependemos de la misma Jefa. Cuando hay personas alcoholizadas también tomamos intervención y trabajamos con el ex Centro de Día.
L.P: ¿Se ha logrado fortalecer el vínculo con la comunidad?
V.Q: A nivel provincial llevamos 20 años de trabajo. La gente reconoce que hacemos un trabajo diferente al de una Comisaría convencional. Tiempo atrás, por disposición del Ministerio de Seguridad, se implementó un corredor seguro que aquí se centró en el barrio 28 de Junio y la gente de los otros barrios reclamaba la presencia de Policía Comunitaria ya que se había abocado todo el personal a un solo sector. Esto ocurrió en 2015 y el reclamo fue planteado por los dirigentes vecinales con quienes hacemos un trabajo conjunto.
L.P: ¿Qué solicitan los presidentes de Juntas Vecinales?
V.Q: Los vecinalitas conocen nuestra función por lo que toman intervención, en determinadas situaciones, y nos pasan la información que elevamos en un informe a otras instituciones con las que trabajamos como por ejemplo Servicio de Protección de Derechos.
L.P: ¿Los fines de semana continúan siendo los días en que se observan mayor cantidad de problemas domésticos?
V.Q: Los fines de semana, por el mayor consumo de alcohol, se nota mayor demanda de intervenciones nuestras.
L.P: ¿Cuáles son los barrios en los que se requiere mayor presencia de Policía Comunitaria?
V.Q: No hay un sector enfatizado, pero por un plan del Ministerio de Nación están reforzados los barrios Cañadón de Borquez, Estación, Bella Vista y Badén. En estos sectores en lugar de un equipo de barrio hay dos. Esto se trabaja en conjunto con la Oficina de Prevención del Delito y Participación Ciudadana.
L.P: ¿Cómo maneja el personal situaciones de violencia?
V.Q: Llevo aquí dos años y no hemos tenido este tipo de intervenciones. La mayoría del personal lleva aquí varios años por lo que la gente los conoce y reconoce la diferencia entre Policía Comunitaria y Policía convencional. La gente sabe que no vamos a demorar o dejar que la situación pase a mayores. Tenemos el efecto de apaciguar. Esto genera un desgaste psicológico para el personal que trabaja a diario en terreno. Ellos trabajan hasta conseguir brindar la ayuda solicitada especialmente cuando se trata de menores o adultos mayores. Aquí se genera un vínculo diferente a lo que sucede en una Comisaría común porque se hace un seguimiento hasta resolver el problema. Incluso, después de eso, se siguen haciendo visitas porque se genera un vínculo.
L.P: ¿Cuenta el personal con contención psicológica?
V.Q: No, y se necesitaría. Lo que hace el personal es practicar deportes para llevar a cabo una actividad diferente a la función que cumple. Se motiva al personal para que realice estas actividades para evitar que lo cotidiano los afecte.
L.P: ¿Sería posible contar con un profesional que brinde contención psicológica?
V.Q: No se ha solicitado por escrito porque contábamos con una Psicóloga Social que venía antes. Ahora nos visita una vez por mes y hacemos algo de terapia, pero es a voluntad y de acuerdo al tiempo que ella dispone.
L.P: ¿Con cuánto personal cuenta para realizar la tarea cotidiana?
V.Q: Somos 23 personas. La mayoría es personal femenino ya que solo contamos con tres masculinos.
L.P: ¿Recibieron una capacitación diferente para cumplir funciones en Policía Comunitaria?
V.Q: Al tener que estar preparados para todo tipo de intervenciones y saber diferenciar entre un delito o una mediación hemos participado de Talleres de Comunicación, Talleres de Conflicto, etc. También hemos gestionado que nos den charlas desde Asesoría y Servicio de Asistencia a la Víctima del Delito (SAVD). Ellos que son profesionales nos brindan herramientas que implementamos al momento de trabajar.
L.P: ¿Qué apoyo reciben por parte de la Jefatura de Policía?
V.Q: Dependemos directamente de Rawson aunque pasamos las novedades de las intervenciones al Jefe de la Unidad Regional. Con la Comisario Mayor Marcela Amado, nuestra Jefa, la comunicación es contínua.
- P: ¿Qué necesitaría para optimizar el trabajo?
V.Q: Quizás sería bueno contar con un espacio propio donde se pueda hacer divisiones y disponer del lugar. L.P: ¿Cuál sería su objetivo final a cumplir como jefa de la Policía Comunitaria de Esquel?
V.Q: Quisiéramos ser profesionales, a través de las capacitaciones, y que la gente quede conforme con nuestro. El objetivo es que la gente pueda darse cuenta que hacemos un trabajo profesional y con vocación.
