En diálogo con La Portada, el intendente de Trevelin, Héctor “Cano” Ingram, manifestó su preocupación por la delicada situación que atraviesa el Frigorífico Dicasur, una de las empresas más importantes de la localidad.

“Es una situación complicada. Yo había estado charlando con el señor Rafael Nataine, me había adelantado que estaba buscando refinanciar la deuda con el Banco y que estaba con dificultades”, comentó Ingram. “Invirtió mucho para poder exportar y, ante la situación que estamos viviendo a nivel país, la apertura de barreras y un montón de factores, se llegó a esta situación que ya conocemos todos”, expresó.

El intendente se mostró preocupado por los trabajadores ya que un eventual cierre dejaría “más de 70 personas que trabajan directamente con el Frigorífico sin trabajo, ni hablar de la cantidad de productores y gente ligada a la empresa que también hoy quedan sin esta herramienta tan importante para Trevelin y la zona”.

Sobre la posibilidad de intervención municipal o provincial, aclaró que “esto tiene una cuestión más profunda”. Explicó que el Estado puede “articular algún acompañamiento desde lo salarial”, pero advirtió que “no es la solución de fondo que debiera tener el Frigorífico”.

“Nos comentó el señor (Rafael) Nataine que hay cuatro posibles interesados en invertir, pero no hay nadie que ya haya dado el okey o firmado un papel”, planteó ‘Cano’ Ingram. “En el mientras tanto tienen que seguir funcionando y nosotros, como Estado municipal, junto al Ministerio de Producción de la provincia, podemos acompañar. Pagar una quincena o un aguinaldo no es la solución: el mes que viene tendrían la misma dificultad”, advirtió.

Para el jefe comunal, “la solución de fondo es que aparezca alguno de estos inversores interesados, que se sume o directamente compre la parte que hoy tiene el propietario”. “Lo más importante es que el Frigorífico no cierre y siga funcionando, porque no hay otro de estas características en la zona y es fundamental para el abastecimiento de carne en la Patagonia”, enfatizó.