Los trabajadores del Registro Civil afiliados a la Seccional Esquel de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) se mantienen, desde hace algunos días, en estado de asamblea y movilización en reclamo del edificio propio, apertura de negociaciones paritarias, participación en la recaudación, redacción de un Convenio Colectivo de Trabajo, recategorizaciones y pase a planta permanente del personal precarizado.
Fernando Cabada, delegado de ATE Esquel, remarcó que contar con un edificio adecuado para el trabajo del personal en su atención a los vecinos de la ciudad y de las distintas localidades de la Comarca Andina quienes realizan trámites en el Registro Civil de Esquel es una prioridad que debe ser atendida.
“Estamos en un edificio alquilado de toda la vida. Se habló de un terreno donde se podría construir nuestro edificio, pero ahora resulta que pertenece a Educación con lo cual no hay posibilidades de que haya por ahora un lugar propio. La idea, entonces, es buscar un lugar que se pueda adecuar a una oficina pública”, manifestó.
En diálogo con La Portada comentó que en el Registro Civil se desempeñan trece trabajadores que atienden a un importante número de personas a diario “tomamos entre 50 y 60 trámites de DNI por mañana y a eso hay que agregarle defunciones y los nacimientos de toda la Comarca y los DNI”. Y agregó que “nos preocupan los sueldos bajos de los empleados, pero también el edificio porque tiene que ver con las condiciones de trabajo”. Resaltó, además, que “la gente tampoco se siente cómoda porque tiene que esperar, en un día frio o de lluvia, haciendo la cola afuera. Las señoras para anotar los nacimientos tienen que subir escaleras quizá con una cesárea reciente y quienes usan sillas de ruedas o muletas también tienen problemas para ingresar porque no da el ancho de la puerta”.
Cabada aseguró que “este nunca fue un edificio adecuado y hace unos meses tuvimos problemas en un baño y se mojaron libros, documentación y maquinas. Es urgente resolver esto y vamos a seguir con nuestras medidas hasta que nos escuchen porque no se puede seguir como estamos”.