Crece la demanda y la colaboración que reciben del municipio ya no alcanza. Ante esta situación, el comedor dejó de funcionar los sábados y sólo abre de lunes a viernes. La presidenta de la Junta Vecinal del Chanico Navarro, Elida Melin, se manifestó angustiada por no poder llegar con las viandas a todos los vecinos que se acercan y pide ayuda al municipio para organizar eventos y recaudar fondos.
La angustia y la tristeza invaden al comedor que funciona hace 6 años en el barrio Chanico Navarro. La falta de alimentos para cubrir la demanda de los vecinos que se acercan en la semana provoca una gran preocupación en quienes con mucho esfuerzo y cariño preparan el almuerzo que en algunos casos llega a ser la única comida del día.
La presidenta de la Junta Vecinal del Chanico Navarro, Elida Melin, manifestó en diálogo con La Portada que no le alcanza la ayuda alimentaria que recibe del municipio y que por el momento no cuenta con la colaboración que le brindaba el diputado nacional Santiago Igon. “Estamos muy complicados, así que ahora el comedor funciona de lunes a viernes y decidimos sacar el sábado porque no llegamos con los alimentos y de hecho hasta he tenido que dejar a varias familias sin comida porque no nos alcanza para todos”, contó angustiada y con la voz quebrada.
Melin además se mostró preocupada por la inminente llegada del invierno y las bajas temperaturas ya que es la época del año en que se incrementa la demanda de alimentos. “Hoy las viandas no me están alcanzando, ya a las 10.30 horas me quedo sin comida y me da miedo lo que pueda a llegar a pasar en el receso invernal porque es cuando más se complica la situación económica para las personas”, planteó.
La vecinalista señaló que el comedor del Chanico Navarro es el único que funciona toda la semana y recibe la misma cantidad de alimento que el resto. “Me traen 3 cajas de pollo, 15 kilos de carne y bife de chorizo para todo el mes así que tengo que hacer malabares con eso porque no llego. Yo puedo poner todas las ganas y las fuerzas pero si no recibo la ayuda que estoy necesitando no puedo hacer nada”, apuntó.
Asimismo sostuvo que “estamos sosteniendo algo que no nos corresponde porque debería hacerse cargo el municipio, pero tratamos de dar una mano desde nuestro lugar”.
Melin tampoco quiere seguir acudiendo a la solidaridad de la comunidad porque entiende que también están atravesando una difícil situación económica. “No me atrevo a pedir ayuda a los vecinos porque muchos están haciendo eventos y mucho esfuerzo para llegar a fin de mes”, declaró.
Señaló además que el municipio conoce la demanda del comedor porque tanto el intendente como diferentes funcionarios han visitado la sede vecinal. “Hace 6 años que tengo la misma problemática y no me gustaría tener que reducir los días del comedor pero si sigo así lo tendré que hacer. Por el momento trato de priorizar a las personas mayores y no cierro el comedor por respeto a ellos que vienen a buscar su vianda”, relató.
Melin afirmó tener “una angustia tremenda” por no llegar con las viandas a todos. “Es muy triste ver la cara de los abuelos y me indigna pasar por esta situación. En las elecciones seguramente vamos a recibir un montón de cosas pero hoy es cuando necesitamos ayuda”, remarcó.
Contó también que ha presentado notas a la secretaria de Gobierno, Mariela Sánchez Uribe, para pedirle autorización para hacer eventos con el fin de recaudar fondos para el comedor. También solicitó permiso para poder vender tortas fritas durante alguna fecha del torneo de futsal.
“No se juega con la necesidad de la gente”
Por otra parte la presidenta del Chanico Navarro explicó que no se encuentra participando de las reuniones entre los referentes barriales y el diputado nacional Matías Taccetta. “Mientras haya un político no voy a ir porque no quiero que se malinterpreten las cosas. Además Taccetta nos mintió y me parece que no tiene sentido sentarse con alguien que hizo eso. Nos prometió que tenía los juegos para hacer una plaza en el barrio y Hollmann nos dijo que no entonces no tengo ganas de que me usen. Con la necesidad de la gente y del barrio no se juega”, subrayó.
Melin agregó que tuvo que volver a presentar el proyecto para un espacio verde en el barrio, que había ingresado en 2017, porque según el secretario de Ambiente no había sido así. “A este barrio lo único que le han hecho es el asfalto de la calle, porque después no ha habido otra obra. Mandé nota para que terminaran el playón deportivo o me lo cedieran, pero no he tenido ninguna respuesta”, finalizó.