“Como comunidad originaria no conviene”, sostuvo la Lonco Rosa Ñancucheo sobre el Proyecto de Ley para crear la Comuna Rural de Lago Rosario y Sierra Colorada. Lo dijo sin eufemismos y firme en cada una de sus palabras. Advirtió que hasta el momento los pobladores del paraje no fueron consultados y consideró que de avanzar la iniciativa perderían derechos.
Hace varios años viene planteándose la posibilidad de convertir a Lago Rosario y Sierra Colorada en una Comuna Rural. Pero el tema cobró fuerza a raíz de la presentación de la diputada Zulema Andén en la Legislatura en el 2016 y el tratamiento que hacen por estos días concejales de Trevelin. El intendente Omar Aleuy no quiere apurarse antes de marcar posición.
Diario La Portada dialogó con Rosa Ñancucheo, Lonco de Lago Rosario. No dudó ni anduvo con evasivas. De frente y para que quede claro: “Como comunidad originaria no conviene”.
Cuestionó que “ningún político” se acercó hasta el paraje para conocer la opinión de la gente y dejó en claro que una decisión de esta naturaleza requiere como punto de partida la voz del vecino.
“Tenemos que ser consultados al respecto y estar todos de acuerdo”, enfatizó en la entrevista concedida a este medio, revelando al mismo tiempo que mantuvo reuniones con algunos pobladores y la negativa es unánime. “Nadie quiere una Comuna”, aseveró y casi que de inmediato agregó que “queremos seguir viviendo como estamos”.
A su vez, destacó la líder mapuche que de aprobarse la iniciativa en la Cámara de Diputados de la Provincia las familias de Lago Rosario “vamos a perder derechos” adquiridos a lo largo de los últimos años y que de arranque cederían autonomía en manos de un jefe comunal.
“Eso es lo que no queremos”, recalcó.
También dijo que nunca avaló la propuesta, tal como escuchó en el Honorable Concejo Deliberante (HCD) del Pueblo del Molino.
“Cómo voy a pedir una cosa semejante sin antes preguntarle a la gente”, subrayó preocupada. Recordó, asimismo, que el tema no es nuevo y que en varias oportunidades quisieron activarlo.
Pidió que antes de avanzar en un Proyecto de Ley primero los impulsores deben “bajar” a terreno y hablar mucho con los vecinos.
“Hay que respetar los derechos que tenemos como comunidad autónoma. Es lo que pedimos siempre. Cuando los políticos necesitan votos opinan en nuestra representación. Eso tiene que terminarse”, amplió.