Actualmente se encuentran entregando 300 viandas de lunes a viernes a vecinos de diferentes barrios de la ciudad pero genera preocupación el aumento de la demanda. Estiman que podría duplicarse durante el invierno. Solicitarán al municipio que les amplíe la partida.
La presidenta de la Junta Vecinal del Chanico Navarro, Elida Melin, se manifestó preocupada en diálogo con La Portada por el incremento de la demanda de alimentos en el comedor que lleva adelante en la sede.
“El municipio está cumpliendo con la entrega de alimentos pero la demanda es muy grande y nunca podemos estar bien. Ahora tengo más gente que antes y no puedo agregar otra olla porque no me alcanza lo que tengo”, explicó.
El comedor funciona de lunes a viernes en la sede vecinal del Chanico Navarro, ubicada en Pintor Antúnez 735 de Esquel, donde se entregan 300 viandas por día a vecinos de diferentes barrios de la ciudad.
“El comedor se está desbordando cada vez más, a las 11 nos quedamos sin comida y queda gente sin poder llevarse una vianda. La situación es desesperante, pero si agrego una olla más me iría a 600 viandas y no puedo porque no me alcanzaría la partida que me da el municipio”, sostuvo.
Melin reconoció que en más de una oportunidad se ha visto obligada a mezquinar alimentos para llegar con todas las viandas. Ante esta situación, tiene pensado acercarse esta semana al municipio para solicitar que le amplíen la partida de alimentos. “Es mucha la demanda y lo que entra de alimentos no me está alcanzando. Estoy llegando con lo justo”, aseguró.
Por otra parte la presidenta del Chanico Navarro comentó que se encuentra muy decepcionada con la gestión actual del gobierno municipal por la falta de respuestas a las necesidades de los vecinos.
Aún continúa sin tener novedades sobre el destino del playón deportivo que se comenzó a construir en el barrio y que hoy se encuentra abandonado. “Le pregunté a Herman Torres -secretario de Obras Públicas- qué iba a pasar con ese espacio porque necesitamos que funcione, aunque se lo den a un club deportivo, pero es importante para el barrio”, remarcó.
También recordó que continúa pendiente el pedido de un espacio recreativo. “Matías Taccetta nos hizo muchas promesas pero no cumplió. Sólo pedimos que hagan una plaza para que los chicos del barrio no anden en la calle porque es un peligro”, planteó.
Hay dos talleres municipales que se encuentran funcionando en la sede municipal, gimnasia para adultos y títeres para niños.
Sin embargo Melin señaló que los vecinos del barrio le manifiestan que son otras las prioridades. Hoy muchos de ellos no llegan a fin de mes y no tienen ni calzado. “A muchos no les importa cómo está el barrio porque quieren comer y es entendible, pero yo no puedo hacer más de lo que hago”, declaró.
La presidenta del Chanico Navarro aseguró que llevar adelante el comedor es una tarea “muy desgastante”. “Yo no tengo obligación de hacer la comida, la empecé a hacer porque me nació en su momento y el ejecutivo en vez de ayudar, pone trabas cuando la responsabilidad es de ellos”, finalizó.
