Con muchas expectativas, la profesora Karem Boudargham inició la semana pasada las clases de danzas árabes en la Asociación Sirio Libanesa. Las mismas son para todos los niveles y todas las edades, tanto para quienes aprender a bailar como para quienes ya tienen experiencia. “Bailar te transporta, te da libertad, fortalece la autoestima, es aeróbico y te proporciona un momento de conexión con vos mismo”, aseguró.
Se trata de una nueva propuesta cultural para quienes quieren introducirse en el mundo de la danza ya sea de manera recreativa o profesional. Las clases empezaron la semana pasada y se dictarán hasta diciembre de este año. Las inscripciones se encuentran abiertas para todos los niveles y edad.
Karem Boudargham se inició en el camino de la danza árabe en la Sirio Libanesa. Allí adquirió sus primeras herramientas artísticas y tuvo la oportunidad de trabajar de manera profesional. Luego continuó su carrera en Buenos Aires, en el Caribe y en Europa. En los últimos años regresó a la ciudad porteña donde desarrolló diversos proyectos y este año decidió radicarse nuevamente en Esquel para concretar otros nuevos.
“Estoy de vuelta en el hermoso lugar que es la Sirio Libanesa, donde hoy tengo la oportunidad de trabajar y donde crecí con mi danza”, destacó Karem Boudargham en su visita a La Portada.
La profesora de danzas árabes contó que su regreso a la ciudad superó sus expectativas porque pudo reencontrarse con quienes fueron sus alumnas y también sumar nuevas. Llegó a tener 115 inscriptas en su escuela.
Boudargham aclaró que no hace falta tener experiencia para anotarse en las clases y también sostuvo que son bienvenidas quienes la tienen para compartirla. “La danza árabe o danza oriental ha evolucionado mucho y esto ha creado algunas confusiones porque últimamente se empieza a enseñar con un estilo fusionado”, explicó.
En este sentido la profesora comentó que prefiere enseñar la danza oriental desde su base y una vez que la bailarina realiza determinado recorrido y tiene la danza árabe incorporada, se abordan las fusiones.
“Durante las clases hacemos un descubrimiento de la tradicional danza oriental, así las chicas ya vengan bailando, que consiste en la ondulación, el golpe y un trabajo concentrado en lo que son los hombros hasta las caderas”, precisó.
Boudargham aseguró que “bailar es lo más parecido a volar, porque te transporta, te lleva a otro lado, te da libertad y es un momento de conexión con uno mismo”. Además señaló que “la danza oriental es muy femenina, te hace mover todos los órganos femeninos y nos introduce en nuestra esencia. Trabaja un montón la autoestima, el oído musical, la musculación y es aeróbica”.
La profesora invitó a las mujeres a acercarse a la Sirio Libanesa y probar la propuesta. “Se puede hacer de manera recreativa o profesional. Se puede tomar como una actividad aeróbica y de esparcimiento como así también con la idea de hacer una carrera”, planteó.
Las interesadas en sumarse a esta actividad pueden comunicarse con la profesora al 1169376386 para consultar días y horarios. También pueden acercarse de lunes a viernes de 16 a 18 horas a la Sirio Libanesa, en 25 de Mayo 369.
Boudargham aseguró que se encuentra con muchas expectativas por continuar transmitiendo sus conocimientos y su pasión por la danza oriental. “La danza es un diálogo en común con gente de cualquier parte del mundo y siempre me ha abierto las puertas a donde he ido. La parte de la danza que más me gusta es la docencia así que me he concentrado en armar programas de estudio para brindar una enseñanza de buena calidad”, concluyó.
