Como una acción solidaria en esta etapa de cuarentena el Rotar Club Esquel puso, con notable repercusión, a disposición de los vecinos adultos mayores y personas de grupos de riesgo la posibilidad de contactar a voluntarios para realizar trámites y compras. Se cuenta para ello con cuatro personas autorizadas por el Centro de Operaciones de Emergencia Municipal (COEM).
Pablo Fleitas confirmó la información a La Portada agregando que la iniciativa surgió “a raíz de que fuimos restringiendo más nuestras actividades comunitarias. Nos pusimos a pensar cuál era la mejor manera, desde la organización, en que podíamos ser útiles”.
“Se nos ocurrió que la mejor idea era ayudar a los grupos de riesgo para hacer trámites y compras a las personas mayores de 60 años” como así también a quienes se encuentran en los grupos de riesgo por afecciones crónicas.
Fleitas mencionó, además, que “también nos contactamos con el Hospital para colaborar con algun elemento que se necesite más adelante en caso de contar con muchos afectados. En función de eso estamos viendo de reunir dinero para tener un respirador más porque todo es útil”.
¿Otra agenda?
Al ser consultado respecto de las acciones prevista por el Rotary Club Esquel antes de la declaración de la cuarentena indicó que “había muchas cosas en agenda” y agregó que “íbamos a trabajar fuertemente en la parte de educación en especial con chicos de Primaria. Proveer elementos, para que los chicos estudien, iba a ser una mochila pesada para los padres que cobran tarde sus salarios porque son empleados del Estado”.
“Preveíamos llevar kits escolares a distintas escuelas”, indicó, resaltando que además se pensaba colaborar en el proyecto de construcción de la Escuela Cacique Inacayal “sin descuidar los pedidos que nos llegan desde las distintas instituciones como por ejemplo el del Hogar de Ancianos de Trevelin”.
“Todo esto quedó suspendido porque no nos podemos mover”, remarcó asegurando que “cuando todo se normalice retomaremos la agenda normal”.
Para finalizar sostuvo que “también hay que considerar la posibilidad que la agenda de trabajo cambie porque habrá que ver cómo quedamos después de esta contingencia con el surgimiento de otra necesidades que hoy no estamos imaginando. Pensaremos entonces cómo aportar nuestro granito de arena antes de retomar la agenda normal del año”.