La finalización del Nivel Medio es para muchos adolescentes y jóvenes una gran satisfacción, pero al mismo tiempo genera preocupación ya que deben elegir una carrera universitaria o terciaria.
El grupo familiar no sólo acompaña esta preocupación puesto que muchos padres también evalúan aquellas opciones que permitan una salida laboral a corto o mediano plazo. El mercado de trabajo – por otra parte – se ve cada día más acotado y resulta aún más exigente.
La necesidad de encontrar un trabajo, para aportar económicamente al sostén del hogar o bien para independizarse, se convierte así en el motivo de desvelo de muchos adolescentes y jóvenes.
La compleja situación económica contribuye a modificar ideas y hasta postergar sueños. Los padres ya no pueden hacer frente al costo que implica enviar a sus hijos a estudiar a otras provincias donde la oferta académica es más amplia. Solventar estadía, manutención y gastos escolares se convirtió en el privilegio de pocos.
Nace así la mayor demanda en las inscripciones a las diferentes carreras que ofrece, por ejemplo, la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB) en sus diversas sedes. Los directivos de la alta casa de estudios confirman una tendencia que no dejó de crecer en los últimos años. Y si bien se muestran optimistas ante el elevado número de inscriptos también son conscientes que ello implica un desafío porque aún no fue definido el presupuesto 2019 para la UNPSJB.
Otro dato que marca la necesidad de capacitación por parte de los jóvenes se obtiene de la demanda en las inscripciones a los Centros de Formación Profesional en las diferentes ciudades de la provincia. En Trelew, por solo citar un ejemplo, muchos jóvenes hicieron colas durante una noche para ser los primeros inscriptos en los cursos.
Las situaciones mencionadas anteriormente marcan dos aristas de un mismo problema: la accesibilidad a la educación aparejada a la crisis económica que afecta a las familias de clase trabajadora.
Ningún joven debería dormir en la calle para poder inscribirse a un curso de capacitación que le permita una rápida salida laboral. Ningún joven debería relegar sus aspiraciones de estudiar en la Universidad que desea sin importar donde ésta se encuentre.
La educación es un derecho. La educación nos permite interpelar a otros y a nosotros mismos. La educación amplía el abanico de posibilidades de crecimiento profesional y personal. La educación nos hace libres. Quien no entienda estos conceptos básicos y /o aplique políticas públicas que reduzcan las facilidades de acceso a la educación no está a la altura de las circunstancias y de lo que el mundo demanda de las nuevas generaciones.
