En este inicio de los festejos de Navidad y Año Nuevo los trabajadores de Diario La Portada creemos necesario hacer llegar a nuestros vecinos una afectuosa salutación y expresarles nuestro agradecimiento por continuar acompañándonos en este desafío de hacer “periodismo sin patrón”.
Si pretendiéramos hacer un balance de este 2018 podríamos decir que fue un año de intenso aprendizaje, aunque seguramente queda mucho por aprender. Los aciertos y errores son parte de la cotidianeidad.
En el transcurso de este año nuestro principal objetivo fue hacernos un pequeño espacio dentro de los medios de comunicación de la ciudad constituyéndonos, además, como una alternativa dentro de los medios autogestionados por sus trabajadores. El camino no ha sido fácil, pero allí están siempre nuestros lectores (de la edición papel y nuestros seguidores en las Redes Sociales) que nos alientan y que confían en que podemos seguir adelante.
La Portada refleja el hacer cotidiano de la ciudad y nos complace que los vecinos se sientan parte del Diario no solo como lectores, sino también como protagonistas de las noticias haciendo lugar a todas las ideas y posicionamientos. La realidad tiene diferentes aristas y es nuestro deber dar a conocerlas.
Este año muchos trabajadores, en diversos momentos, fueron afectados por la compleja situación económica y la pérdida de sus fuentes de trabajo. Pudimos ver, lamentablemente, a nuestros vecinos vivir lo que nosotros vivimos hace dos año. Esas son las noticias que no quisiéramos dar, pero las que nos acercan porque somos parte de esta comunidad.
Un párrafo aparte merecen nuestros suscriptores y comercios amigos que a pesar de las dificultades económicas nos acompañaron todo el año. Sin ellos sería difícil seguir adelante y merecen todo nuestro agradecimiento. El compromiso con ellos – y con toda la comunidad – es continuar afianzándonos como medio de comunicación alternativo. Entre todos podemos hacer el Diario de Esquel para reflejar la historia de la ciudad.
En estas Fiestas sólo queremos decirles gracias y desearles lo mejor. En el abrazo que podamos dar y recibir encontraremos la fuerza para enfrentar desafíos personales y para trabajar en la construcción colectiva de nuestra querida Esquel más allá de las diferencias.
