Por India Prieto.
En pleno corazón del valle, nos encontramos con dos artesanos del buen sabor, quienes cada domingo deleitan a más de un paladar en la plaza de Trevelin.
Cynthia y Leo son los encargados de elaborar alfajores y chocolates de nuestro Pueblito Andino.
¿Cómo nace Pueblito Andino?
Cuando nos mudamos de Buenos Aires a Trevelin, teníamos la idea de trabajar por nuestra cuenta. Mi marido es mecánico, yo soy pastelera, pinto y también hago tallado en madera. Pensamos que las artesanías iban a andar bien porque había turismo y cuando nos mudamos, nos dimos cuenta que si bien hay, es muy poco tiempo y no es posible vivir de eso.
¿Quién es el que compra, el que viene de paseo o el público local?
Al principio el turista que venía y nos veía en la plaza, pero ahora, con la pandemia, el público local nos ha elegido en muchas oportunidades, se volcó a comprar productos locales. Pero en cualquier año normal, mayormente nos compran los turistas.
¿Qué nos pueden contar acerca de su emprendimiento?
Empezamos como un stand de tortas, los domingos en la plaza de Trevelin y acompañando a las tortas también vendíamos alfajores bañados en chocolate. En ese momento nos dimos cuenta que nadie vendía el típico alfajor regional para que la gente se lleve de recuerdo, todo fue avanzando y hoy por hoy incorporamos la elaboración de chocolates. Una producción totalmente nuestra.
Tenemos variedades que van desde el tradicional de leche que es más dulce, hasta el chocolate para submarinos, pasando por diferentes opciones. Algunos están combinados con almendras y otros con frutos secos; otros con un toque de amargor extra que están hechos con nibs de cacao hasta llegar al chocolate más amargo con el 70% de cacao.
¿Tienen opción para celíacos?
Si bien utilizamos productos sin TACC, no elaboramos productos para celíacos, porque se necesita una sala de elaboración aparte y todavía no la tenemos, así que siempre tenemos la precaución de aclarar eso.
¿Cuál es la fecha de vencimiento de los alfajores y chocolates?
Para los chocolates es recomendable que se coman dentro el año, contado a partir de la fecha de elaboración. En el caso de los alfajores, aconsejamos que se consuman dentro de los dos meses – ya que no tienen conservantes ni aditivos– y de esa forma se pueden apreciar mejor los sabores. Es íntegramente elaboración casera.
¿Tuvieron buena recepción sus productos?
Sí, tienen éxito porque el producto es bueno, hecho con cariño y todo casero. Utilizamos ingredientes que en su mayoría son de la zona, primordialmente el dulce de relleno, y nosotros hacemos el chocolate, las tapitas y las diferentes combinaciones de sabores. Los alfajores se bañan uno por uno de manera artesanal y eso a la gente le gusta, por eso sabemos que somos una buena elección. A los clientes les gusta comprar de diferentes gustos y les ofrecemos con frutos rojos, frambuesas, dulce de leche con cobertura de chocolate blanco, alfajor de chocolate negro y uno especial, que es la ‘versión alfajor’ de la conocida torta galesa.
¿Hay alguna cámara que nuclee a los pequeños emprendedores?
Cámara no. Nuestra agrupación sería la feria regional. Esa feria se hace organizadamente desde los primeros días de diciembre hasta fines de febrero, pero si hay turismo se extiende hasta los primeros días de marzo.
La feria durante el año es gigante pero durante el año los que vivimos de esto también seguimos yendo y podemos llegar a subsistir un poco con el turista que viene fuera de temporada. Que los hay, pero si viniera más turismo seríamos muchos más los que podríamos vivir de lo que nosotros producimos.
¿Ustedes participan en otras ferias fuera de Trevelin?
Sí, hemos ido a Comodoro Rivadavia y a Comandante Luis Piedra Buena en provincia de Buenos Aires. Cada vez que nos vamos a otro lugar pedimos folletería de Trevelin para poner en nuestro stand. Es nuestro granito de arena para colaborar, hacer publicidad para que en la temporada venga más turismo, que al fin de cuentas es lo que queremos todos.
¿Qué creen que le falta a Trevelin con respecto al turismo?
Le falta más publicidad porque la gente que viene se enamora, porque el turista que llega es porque está interesado en conocer. Si se diera a conocer más, vendría mucha más gente, porque es un lugar que tiene mucho potencial, acá hay una opción diferente para cada día, tranquilamente el turista puede estar diez días mínimos acá, sin repetir el plan.
¿Qué les gustaría para “su Pueblito” de acá a unos años?
Proyectamos tener nuestro propio espacio de elaboración con habilitación nacional. Pero por ahora es difícil por la situación actual de la provincia y el país respectivamente.
¿Hay ayuda para dar a conocer la actividad de los pequeños productores de la zona?
Eso es algo que se planteó en reuniones que hemos tenido, pero nunca lo hicieron. No pedimos ayuda para publicitarnos nosotros sino a la Feria Regional en sí.
Es muy raro, la feria artesanal de cada lugar siempre está presente en su folletería turística y acá no, eso es lo que no se entiende, pero tenemos esperanza de poder estar. Nosotros no pretendemos subsidios pero sí nos gustaría que ayuden a los productores en la difusión de las actividades que realizamos.