Quienes viajan en estos días desde nuestra ciudad hacia la costa de la provincia, se encuentran con una importante cantidad de animales sueltos a lo largo de casi todo el trayecto de la ruta N° 25. Por tal motivo, los que emprendan viaje por dicha ruta, deben prestar mucha atención para evitar accidentes.

Además de las liebres, que se suelen encontrar en todo el trayecto sobre todo en horario nocturno, durante el día los automovilistas se pueden topar con gran cantidad de corderos, guanacos, choiques (ñandú) y martinetas, que suelen cruzar por la cinta asfáltica de manera imprevista.

Cabe destacar que por lo general, este tipo de animales se mueven en grupos, por lo que hay que prestar mucha atención a lo largo de todo el trayecto. Yendo hacia la costa, a pocos kilómetros después de Tecka ya se comienzan a divisar estos animales a orillas de la ruta o incluso cruzando la misma.

El panorama se repite hasta prácticamente llegar al ingreso a la localidad de Gaiman. Son varios los relatos de automovilistas que embistieron a alguno de estos animales de gran porte como guanacos o choiques, que provocan grandes daños en los vehículos y hasta pueden producir accidentes más graves.

 

Mal estado de la ruta

 

A la presencia de animales, también hay que agregar el mal estado en que se encuentran algunos tramos de la ruta N° 25, sobre todo pasando la localidad de Paso de Indios hasta Las Plumas. Hay sectores con muchos baches y otros que se encuentran en reparación.

Dicho tramo, de aproximadamente 160 kilómetros no está en óptimas condiciones y esto es un detalle más que los conductores deben tener en cuenta a la hora de hacer este recorrido, disminuyendo la velocidad y prestando atención tanto a los animales como a los baches.

Unos 20 km antes de llegar a Las Plumas, un sector de la ruta se encuentra en reparación y los desvíos de ripio tienen muchas piedras sueltas, motivo por el cual los automovilistas deben circular con precaución para evitar dañar el vehículo propio o causar algún accidente.