En la pasada sesión del Concejo Deliberante de Esquel, el presidente de la Junta Vecinal del barrio 28 de Junio, Gastón Escobar, hizo uso de la banca del vecino para presentar un proyecto de ordenanza que propone que las juntas vecinales participen en la elaboración del presupuesto municipal.

En su exposición ante los 10 concejales, Escobar agradeció el espacio institucional y destacó el valor político de la instancia, a la que consideró “no solo una formalidad institucional sino como una herramienta fundamental para acercar la voz de los vecinos y de los barrios al lugar donde se toman decisiones”.

El referente barrial explicó que la iniciativa se desarrolló en representación de los vecinos del 28 de Junio, barrio que el año próximo cumplirá 45 años. “Son 45 años de construcción comunitaria, esfuerzo y también de postergación, hay que decirlo con claridad”, afirmó.

En relación con el proyecto de ordenanza, Escobar aclaró que no se trata de una iniciativa aislada. “No arranca de foja cero, sino que se sostiene en el estatuto de las Juntas Vecinales, que ya reconoce la participación de los vecinos”, explicó. Sin embargo, remarcó que la intención es ir un paso más allá y en este escenario “proponemos fortalecer y hacer efectiva esta participación, porque participar no puede ser solamente que nos informen, sino también incidir en la realidad efectiva”.

La propuesta concreta apunta a modificar el inciso H del artículo 5 del estatuto. Según detalló, esta idea contempla tres puntos centrales: que las juntas vecinales sean convocadas al tratamiento del presupuesto, que reciban el proyecto de presupuesto general y que se garantice “el 5% anual del presupuesto destinado a obras, programas y servicios definidos por los vecinos de cada barrio”.

Escobar subrayó que esta iniciativa pretende ser “una herramienta de democratización, transparencia y eficiencia”: “Nadie conoce mejor las necesidades de los barrios que quienes los habitamos todos los días”. En esa línea, afirmó que “la participación vecinal no debe ser vista como una dificultad, sino como una fortaleza institucional y una forma concreta de cogestión entre el Estado municipal y la comunidad organizada”.

45 años de postergaciones

El presidente de la Junta Vecinal también vinculó el proyecto con la realidad concreta del barrio 28 de Junio, al señalar que la iniciativa surge de demandas históricas no resueltas. “Nuestro barrio presenta graves demandas en materia de obra pública”, indicó, y puso varios ejemplos como las calles en mal estado, la necesidad de pavimentación o adoquinado, y la escasez de espacios públicos como plazas y playones.

“Estamos pidiendo equidad territorial. Esquel no puede seguir creciendo con barrios de primera y barrios de segunda”, advirtió, y cuestionó que la obra pública no debe aglutinarse “solo en determinadas zonas mientras otros barrios envejecen sin infraestructura básica adecuada”.

Escobar remarcó que, a lo largo de sus 45 años de historia, el barrio no contó con una presencia sostenida del Estado municipal. “Los diferentes gobiernos no han estado presentes de manera sistemática, sino de manera fragmentada”, afirmó. Por eso, explicó que el pedido actual es contundente: “Que el desarrollo de la obra pública en los barrios de Esquel sea puesto en la agenda pública y política del Concejo Deliberante y del Ejecutivo Municipal, no como promesa de campaña ni como respuesta a una urgencia, sino como una política planificada, con participación vecinal, un presupuesto asignado y continuidad en el tiempo”.

En el cierre de su intervención, el referente barrial destacó el rol de las juntas vecinales como actores comunitarios. “Las Juntas Vecinales no somos un obstáculo ni una carga administrativa, somos organizaciones con legitimidad territorial, con conocimiento real de los problemas de nuestros territorios y un profundo trabajo voluntario ad honorem”, señaló.

Finalmente, Escobar aseguró que la iniciativa no busca confrontar, sino aportar a una ciudad más equitativa. “Este proyecto y este reclamo por la obra pública no buscan confrontar, sino construir una ciudad más justa, integrada y democrática”, concluyó. Por último, solicitó al Concejo Deliberante que “tome esta propuesta, la discuta, la mejore si es necesario, pero sobre todo que la haga propia, porque fortalecer la participación vecinal es fortalecer la democracia local”.