La presidenta de la junta vecinal del barrio Matadero, Gladys Hidalgo, expresó una vez más su preocupación e incertidumbre por el funcionamiento del comedor que tiene lugar en la sede. Esto se debe, según indicó, a que “el municipio nos recortó muchísimo” la provisión de alimentos.

En contacto con La Portada, la dirigente barrial expresó su agradecimiento por la gran cantidad de donaciones que reciben y que, en muchos casos, les han permitido mantener abierto el espacio. En este sentido, resaltó que fueron apadrinados por el Colegio Salesiano y gracias a lo que aportaron los alumnos pudieron trabajar mejor la semana pasada.

Hidalgo comentó que le acercaron el listado de beneficiarios que se entrega regularmente a Matías Casatti, director de Promoción Social. “Nos habían dicho que si aumentaba la cantidad de familias nos iban a aumentar los alimentos, pero nos están recortando la mercadería”, cuestionó.

“El mes que pasó nos recortaron la salsa, fideos, carne y no estamos llegando ni con las donaciones”, agregó la presidenta de la junta vecinal. Según les expresó el mencionado funcionario, esto se debe a que el dinero destinado a los comedores debe cubrir todo el año. Sin embargo, se encuentran en una situación donde cada vez tienen más demanda y menos recursos para cubrirla.

Detalló que entregan un total de 206 viandas los lunes, miércoles y viernes. Entre otras cosas, en el último tiempo han tenido productos fundamentales como carne roja y pollo gracias a donaciones.

Argumentó que el municipio “no es ajeno” y desde su punto de vista “no está cumpliendo la ordenanza”. “Yo llevo el listado cada 15 días como ellos lo piden y por eso saben que aumentó la demanda de familias, lo ven por escrito”, enfatizó Hidalgo.

Dentro de los beneficiarios del comedor hay gente de todas las edades. No obstante, expresó su especial preocupación por niños y adultos mayores. La realidad se agrava por “la situación económica que atravesamos todos”, principalmente con los aumentos que llegaron en las facturas de gas, expuso. 

“Nos duele y a veces nos dan ganas de cerrar el comedor cuando los que tienen empiezan a criticar. Los comedores no estamos para criar vagos”, señaló e invitó a estas personas a visitar el lugar: “Que vengan a ver si son capaces de estar”.

Pedido de audiencia con Taccetta

En este contexto, la dirigente vecinal afirmó que pedirá una audiencia con el intendente, Matías Taccetta: “Yo necesito que me comuniquen si este comedor está registrado, de dónde sale la plata. Si estamos registrados, se supone que tienen que recibir de provincia o nación”.

“Estamos dolidos porque no cambiaron los funcionarios. Taccetta no es ajeno a esto, todos los funcionarios de Desarrollo Social ya estaban en el municipio, eso enoja y duele. No están viendo la realidad”, agregó Hidalgo. Aseguró que se pretende sostener una imagen de que en la ciudad todo anda bien, pero “nadie quiere hacer saber que Esquel la está pasando mal”.

Consideró que “no es justo que el pueblo tenga en pie al comedor cuando el Estado se tiene que hacer responsable”. “Yo no me voy a prender a ningún político y no voy a utilizar la necesidad de mi barrio y de la gente. Yo sé lo que es pasar hambre y frío”, finalizó Hidalgo.