El director de teatro Luis Bertero regresó a Esquel con una obra bajo el brazo que se presentará durante este próximo fin de semana. Luego de algo más de un año y medio fuera del país y ahora radicado en España, trabajó desde Europa de manera virtual con un equipo de teatro esquelense para dar forma a la presentación de la obra ‘Quizás’, de Sol Pavéz.
En diálogo con La Portada, Bertero compartió su experiencia en ese país y cómo se gestó el trabajo para la mencionada obra. Recordó que se fue el 11 de diciembre de 2021 a “pasear, a recorrer, en ese momento yo me jubilaba, y decidí hacer la despedida de los grupos de Teatro Cosas de Madre y Buena Cara”.
Durante el primer año vivió en la casa de una amiga en un pueblo de Tarragona en Cataluña. Ahora, está instalado en Valladolid. “Estamos viviendo un año en cada lugar, conociendo toda la zona, la cultura y paseando mucho”, reveló Bertero. Al mismo tiempo, adelantó que a futuro el objetivo es trasladarse a Italia donde tiene familia “para reforzar mi italiano y conocer la cultura”.
En este sentido, dejó en claro que su casa y su ciudad “es Esquel”. “Además no tengo la realidad de mucha gente que se tiene que ir. Tengo 62 años, estoy viviendo este momento sin saber cuánto va a durar, pero la paso muy bien y tengo mucha actividad porque estoy trabajando en teatro”, indicó.
No obstante, dijo que “siempre hay que aclarar que mi realidad es diferente a otra gente que se tiene que ir por razones de trabajo”.
A pesar de que le está yendo bien, reconoció que extraña la Argentina. “Se extrañan los afectos, los abrazos. Los argentinos somos mucho de abrazarnos, de besarnos, de compartir un momento, golpear una puerta e ir a tomar unos mates, pero allá es diferente, tenés que avisar con cierta cantidad de días que vas a ir y ver si pueden estar y si te van a recibir o no”, explicó.
Las costumbres argentinas, de todos modos, lo acompañan en donde esté: “Yo necesito mis mates a la mañana, me cuesta mucho conseguir el corte de carne argentino, y yo estoy muy pendiente de cómo está mi país, de la realidad de mi ciudad, de la provincia”. “Tengo amigos que son de España que me dicen que no puedo soltar a Argentina, estoy pendiente porque Argentina es mi vida”, aseguró.
De los 60 años que vivió en nuestro país, casi 40 fueron en Esquel. Por eso “no tengo ganas de largar nada, quiero saber cómo están”.
Trabajos teatrales
Si Argentina y Esquel son parte fundamental de su vida, está claro que para Luis Bertero el teatro también lo es. Por eso, tampoco se desprendió de él en su estadía en el Viejo Continente.
“Estuve haciendo algunas capacitaciones en la Secretaría de Cultura de Valladolid, con grandes maestros, con un francés que es una maravilla. Yo no lo había experimentado nunca, él trabaja la caracterización teatral con el cuerpo totalmente cubierto de arcilla y fue una experiencia maravillosa para mí”, comentó el director, entre otras cosas que realizó.
En esta línea aclaró que, si bien está “totalmente integrado”, no cuenta nada sobre su trayectoria al momento de comenzar en algún espacio. “Me presento como un integrante más y arrancando de cero. Está bueno porque estoy experimentando con mi cuerpo, con mi voz y con mi teatro desde otro lado”, compartió Bertero.
Añadió que “si vos te presentás diciendo yo tuve dos cooperativas de trabajo en Esquel, soy director de teatro, actor, es como que también la entrada es diferente”: “Me presento diciendo que soy Luis Bertero, me gusta mucho el teatro, quiero hacer teatro y quiero mover el cuerpo. A partir de ahí, cuando después ya me conocen un poco más, digo quién soy”, apuntó.
En cuanto a la cultura, comparó las realidades de Argentina y España y consideró: “Allá hay mucha inversión y mucho dinero, no vamos a decir que todo el dinero porque la cultura sigue siendo la hija más pobre, pero hay inversión, muchos teatros, espectáculos, grupos independientes trabajando y subsidiados o solventados por el Estado y hay una inversión desde lo privado”.
Continuó explicando que “acá la seguimos peleando y tiene una virtud, que es que siempre lo vamos a hacer, nada nos va a parar en la Argentina para seguir produciendo cultura”. “Podremos hacer con menos dinero, con cosas más chicas, con producciones más acotadas, pero la cabeza va a funcionar siempre y eso a mí me parece fundamental. Donde falte un recurso económico, está la pasión”, enfatizó.
Quizás
En cuanto a la preparación de la obra que presentarán, resaltó que “un día hablando con Fernando Silvestri y Lucía Pérez Marrero, les dije que tenía ganas de dirigir”. A partir de esto, comenzaron a trabajar en la virtualidad el 3 de abril, durante dos horas, con la promesa de que cuando avanzaran lo suficiente él viajaría a Esquel para presentarla.
“Hicimos casi cuatro meses de virtualidad, ahora llegué y estamos todos los días ensayando entre 5 y 6 horas, para darle un toque final”, amplió. Dijo que “es una obra maravillosa. Yo me enamoré de ese texto de Sol Pavéz. Creo que va a funcionar muy bien y a la gente le va a encantar”.
La obra teatral es del género absurdo, por lo que “está atravesada por humor, pero ese humor que vos ves y te reís, también te hace pensar que estos dos pibes están sufriendo, hay una cosa muy maravillosa que se da en esta obra con estos personajes”.
Las entradas ya están a la venta en Belgrano 330 de 14 a 20 horas con un valor de 2.000 pesos y las funciones serán el 4, 5, 6 y 7 de agosto.
El equipo
Además de Bertero y los mencionados Pérez Marrero y Silvestri, actriz y actor en escena, trabajan Karim Chelbi Camba en la producción y Alina Greslebin en la Asistencia de Dirección.
Cabe señalar que el director luego de las 4 funciones de estreno volverá a España, pero la obra quedará girando con el resto del equipo en la zona.
Sinopsis
Él se arregla y ella aparece. Se miran, intentan un diálogo y desean la conversación.
Así comienza QUIZAS… tal vez una cita a ciegas, una historia de amor, o una historia de encuentros y desencuentros. Sol Pavéz autora de la misma decía en su momento: “Quizás” surgió a partir de la necesidad de hablar sobre el amor en toda su formas, con sus partes más crueles, de la imposibilidad de ver al otro por tratar de sostener que es quien uno quiere que sea, de la compulsión a intentarlo a pesar de todo, incluso a pesar del otro, de los instintos y los instantes, los instintos, de muerte y de preservación, y los instantes, esos momentos en los que el deseo de amar y matar pueden despertarse desde un mismo lugar y en ambos casos necesitamos del otro”.
Quizás… es una obra atravesada por el humor, por el amor y es una cita a ciegas, un encuentro desesperado y un recorrido absurdo por tratar de sostener que el otro, es quien uno quiere que sea.