A partir de este año la Oficina de Prevención y Atención de la Violencia con Perspectiva de Género de la Municipalidad pasó a tener rango de Dirección. Jerarquizar el área supone más presupuesto y recursos para abordar una problemática presente en la sociedad.
A un día del 8M, vale recordar que dentro de la Secretaría de Desarrollo Social funciona desde enero la Dirección de Prevención y Atención de la Violencia con Perspectiva de Género. A cargo está Paula Daher Scaglioni, que se desempeñaba en Niñez, Adolescencia y Familia.
El intendente Sergio Ongarato venía masticando la decisión hace un tiempo. Había que jerarquizar la Oficina que atendía la violencia con perspectiva de género. De la mano del 2022 finalmente llegó esta reorganización que prevé más herramientas para el abordaje de los casos.
En el gobierno creían necesario “mejorar la calidad institucional y avanzar en políticas públicas de prevención y asistencia reconociendo la importancia que ellas tienen a fin que contribuyan a erradicar este flagelo en nuestra comunidad”.
La Dirección está motorizada por un equipo conformado por la propia Daher Scaglioni, una trabajadora social, tres psicólogas, una socióloga, una comunicadora social, dos operadoras y una persona referente en materia de diversidad.
El área pretende hacer “un abordaje integral a las personas que atraviesan situaciones de violencia por motivos de género que garantice la igualdad en el acceso y ejercicio de derechos para mujeres, lesbianas, gays, bisexuales, travestis, transexuales, transgénero, intersex, etc.”.
El municipio trazó un plan estratégico con tres ejes centrales: prevención de las violencias con perspectiva de género; atención integral de las violencias por motivos de género; y fortalecimiento institucional en la Casa Refugio Cumelcan.
En acción
Daher Scaglioni repasó las acciones impulsadas por el equipo a lo largo de los últimos meses. Mencionó entre ellas la creación de canales y redes de comunicación, campañas de educación, información, sensibilización y concientización acerca de la problemática de la violencia de género.
Destacó la visibilización de la Línea 144 y 145 con campañas gráficas informativas, en espacios públicos, redes sociales y medios de comunicación locales y provinciales, visibilización de nuevas políticas públicas, efemérides y propuestas con perspectiva de género.
Dijo que además se llevaron a cabo trabajos para el observatorio de medios y material orientativo sobre lenguaje inclusivo para fomentar iniciativas tendientes a mejorar el tratamiento con perspectiva de género en los medios de comunicación.
Otro de los puntos, enfatizó la funcionaria, fue la promoción de líneas de capacitación para la inserción laboral de las mujeres y diversidades. Se crearon Talleres de Cocina, Huerta y también se diseñó el proyecto del taller de Corte y Confección.
Realzó la creación de la Red de Trabajo para Mujeres y Diversidades. “Se trata de una red virtual autogestiva que busca ser un espacio de intercambio basado en la revalorización de productos y servicios brindados por mujeres y diversidades. El objetivo es promover la autonomía económica y fortalecer sus capacidades”, planteó.
Habló de la implementación del Cupo Laboral Trans que incluyó la capacitación del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad de Nación, la Creación del Registro Único de Aspirantes (RUA) y posterior ingreso de una persona del colectivo inscripta.
Remarcó la funcionaria que desde la Oficina se organizaron distintas capacitaciones, encuentros y conversatorios en clave de géneros y diversidades destinado a coordinadores del PAE, talleristas del TAMFIC y TAMFOC, alfabetizadoras/es y educandos del PAM.
“En lo que respecta al Programa de Abordaje Integral para personas en situación de Violencia con Perspectiva de Género, se logró la Creación y activación de dos protocolos: uno de abordaje institucional de la OPAVPG, y otro de Intervención Municipal ante situaciones de violencia”, acotó.
Además, avisó que están trabajando coordinadamente con el Ministerio de la Mujeres, Géneros y Diversidad en la aplicación y desarrollo de programas nacionales de evaluación, gestión y seguimiento.
También se refirió al trabajo en la Casa Refugio Cumelcan, a través del relevamiento y análisis situacional de la institución para determinar las transformaciones necesarias en pos de su correcto funcionamiento, la atención integral de la persona víctima de violencia por motivos de género (salud, vivienda, trabajo, educación) y otras actividades como el trabajo en red y diversos talleres.
Proyecto Barcelona
Uno de los últimos avances fue la firma del acuerdo para implementar dispositivos socioeducativos dirigido a varones que ejercen violencia de género articulado con el Poder Judicial.
El Proyecto Barcelona es un programa socioeducativo en donde mediante dispositivos que llevan a cabo equipos técnicos se busca la modificación de patrones de conducta de hombres que ejercen violencia de género y son derivados por la Justicia.
Consta de tres etapas: capacitación y entrenamiento de los profesionales, una segunda que es la implementación y supervisión de casos y una tercera: la investigación, con una duración de tres años en total.