Florencia Retamosa, profesora de danza española que transcurre el aislamiento social en la ciudad de Esquel junto a su madre, en diálogo con La Portada se refirió a la posibilidad de retomar el dictado de clases, los días sábados en instalaciones de la Escuela María Taglioni, de manera presencial de acuerdo al protocolo de bioseguridad dispuesto para la actividad.
“En junio pudimos reincorporarnos a las clases presenciales luego de la aprobación del protocolo por parte del Comité de Emergencia Municipal (COEM). Empezamos a trabajar con grupos reducidos de alumnos y con personas que no están dentro de los grupos de la población de riesgo”, manifestó. Y agregó que el protocolo “implica que no podamos volver a la total normalidad de las clases porque son más reducidas en tiempo. De todas maneras es positivo poder volver al aula”.
Retamosa sostuvo, en relación a las medidas a tener en cuenta para el dictado de las clases presenciales, que “hay que mantener la distancia entre alumno y alumno (con lo cual no es la misma cantidad de gente que antes), entrar y salir con tapaboca (alumnos), tener elementos de desinfección a mano (profesores), disponer de alcohol en gel para todos. Las clases no pueden tener duración de más de una hora. Entre clase y clase hay media hora que se debe utilizar para desinfectar las áreas usadas y ventilar para poder recibir al próximo grupo”.
Virtual también
Señaló que “las propuestas son clases de flamenco y estamos pensando el tener más horarios” al tiempo que mencionó que “paralelamente seguimos trabajando bajo la modalidad on line porque en el país y en el mundo hay gente que aún no pueden salir de sus casas. La modalidad on line nos permitió estar en contacto con gente de otros países y provincias del país lo que nos permite seguir formándonos y encontrándonos”.
Remarcó, en este sentido, que “la virtualidad nos permitió abrir la cabeza a nuevas posibilidades” resaltando que “en mi caso es la primera vez que estoy fuera de Buenos Aires en esta etapa de mi carrera profesional. En un primer momento eso me causó cierto pánico, pero lo cierto es que la virtualidad me permitió estar en contacto con mis compañeros y maestros”.
Indicó, asimismo, que “hay cursos y seminarios de la Academia Amor de Dios de Madrid que se puede cursar también en forma virtual” permitiendo realizar un importante ahorro económico. Para finalizar, Retamosa, aseguró que “volver a sentir la energía en el encuentro es distinto y – además – es una posibilidad de trabajo para los independientes que no tenemos un sueldo formal y estable”.