En el día número 19 de la ocupación pacífica del ingreso al edificio de Supervisión de Escuelas, por parte de docentes de la ciudad y la región, se llevó a cabo en ese espacio el Acto por el Día de la Bandera.
El mismo comenzó con el ingreso de la “Bandera de la Unidad y la Dignidad” confeccionada por docentes, estudiantes y trabajadores de educación. Posteriormente se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino con el acompañamiento instrumental de docentes y estudiantes del Instituto N°818 y Escuela de Arte N° 758. La danza, minutos después, estuvo a cargo del Instituto de Arte Nativo Ayehuen.
El docente Claudio Ramos tuvo a su cargo el discurso el que comenzó recordando que “hace casi 200 años, un 20 de Junio de 1820, moría en Buenos Aires enfermo, solo y muy pobre Manuel Belgrano uno de los servidores más virtuosos de la Revolución”.
Mencionó, además, que “mucho antes del 25 de Mayo de 1810 Belgrano ya se había entregado entero a la independencia desde su labor como periodista, economista y abogado”. Destacó que Belgrano fue “un revolucionario, pensador y ciudadano capaz de olvidarse en todo momento de sí mismo para sacrificarse por el bien de todos”.
Manifestó, para finalizar, que “la vida de Belgrano no solo demuestra su generosidad y sentimiento de Justicia, sino que además encierra un sacrificio de amor por la verdad y por los intereses de la patria. Hoy, a casi dos siglos de su partida, debemos preguntarnos si como argentinos seguimos conservando el compromiso que tuvo un simple hombre por el que sacrificó una vida entera al servicio de su pueblo incluyendo a los más desprotegidos y convirtiéndolos en protagonistas de su propia historia. Su legado más importante es que cada uno de nosotros, desde su propio lugar, pueda elegir el compromiso y la lucha en contra de toda desigualdad. Y el orgullo de sentirse argentino por los valores que siguen vigentes para nosotros: la unión como pueblo y el deseo de no rendirnos nunca ante las injusticias”.