Llegó en 1948 junto a su marido e hijos mayores. Hoy con 85 años es la pobladora más antigua de Aldea Escolar. Días atrás estuvo en el acto aniversario, donde recibió un merecido reconocimiento del municipio.
Laura Zenteno afirma: “Aldea Escolar está adquiriendo la forma de pueblo”.
Sólo un puñado de casas había a fines de los cuarenta. Aldea Escolar atravesaba sus primeros años de vida tras el famoso decreto del Gobierno Nacional. “Cada cual limpiaba un pedazo de tierra para asentarse. Vine con mi marido y mis hijos mayores”, recuerda.
Dice que el paraje creció en los últimos años y que va “adquiriendo forma de pueblo”. Considera que en algunas décadas podrá ser tan grande como la localidad de Trevelin. Para Laura la Hidroeléctrica “Futaleufú” representó un antes y un después, allá en los setenta.
“Veo que hoy cada vez está más lindo. Tiene la forma de un pueblo”, resalta orgullosa del lugar donde vive. En enero del año próximo cumplirá 86 y su vitalidad la hace aparentar de menos. Muestra una sonrisa grande cada vez que menciona a la Aldea.