El presidente de la Cámara de Comercio, Jorge Castillo, sostuvo que el sector atraviesa momentos de zozobra y preocupación. Dijo, además, que las ventas no repuntan y que varios locales cerraron sus puertas en la ciudad. “Tenemos el compromiso de no despedir a la gente”, aseveró.
“La situación del comercio es muy complicada”, le aseguró el titular de la cámara a diario La Portada. “Lo vivo en mi negocio que generalmente trabaja mucho pero hoy no hay gente”, soltó esperanzado en que la ejecución de obra pública reactive la economía local.
Reveló que los comerciantes deben conservar una administración equilibrada y cuidar el peso. “Estamos dando vacaciones al personal. Tenemos el compromiso de no despedir a la gente”, manifestó a este medio el experimentado dirigente.
Lamentó asimismo que en estos últimos meses hubo algunos cierres y reconoció que el panorama golpea sobre todo a los locales chicos. “A las tiendas les ha ido muy mal. Por ejemplo, el Día del Padre se vendió muy poco”, añadió Castillo.
Afirmó que la presión tributaria es grande y esto dificulta las finanzas de cualquiera. “Hay comercios grandes de muchos años con más espalda del que recién arranca. Es difícil mantener a empelados; las cargas sociales y los impuestos son altos”, acotó.
Subrayó a su vez que las obras de infraestructura y la temporada turística de invierno -con el Centro de Actividades de Montaña “La Hoya” a la cabeza- son dos factores que pueden ser útiles para mejorar los niveles de consumo y así la actividad comercial.