Por  Dr. Alejandro Fernández Vecino*

En una madrugada fría del mes de Agosto, maestros y trabajadores petroleros se enfrentaron con violencia en una ruta del Sur, en el marco de un conflicto lastimoso donde el Gobierno Provincial de Mariano Arcioni zozobra cada día sin poder dar respuestas concretas, ante un Pueblo Chubutense que se encuentra cansado, agobiado de tanto abandono y deterioro material y moral.

Como es posible que Chubut, una de las Provincias más ricas de la Argentina llegue a esta situación de colapso global donde no logra  garantizar el mínimo cumplimiento de sus obligaciones básicas, hacer funcionar sus Escuelas, sus Hospitales, sus reparticiones públicas, su administración de justicia?

De dónde viene esta crisis?

Dónde buscar los orígenes de este lastimoso presente?

Quizás el Gobernador Arcioni sea el último actor de reparto de una larga tragedia anunciada, que comenzó hace ya muchos años. Los orígenes deberían buscarse en las últimas décadas, cuando empezó a gestarse  un modelo de gobierno rentista, depredador de recursos, dilapidador del crédito público, fomentador de las dádivas, tráfico de influencias y donde el principal instrumento de la construcción y conservación del poder político fue el facilismo de “pedir prestado”, mientras se practicaba el entretenimiento de conformar a todos, por supuesto con un poco de corrupción para cada uno, consolidando un modelo donde la única matriz fue la dependencia Estatal.-

Veamos: En 2003 asumió como Gobernador Mario Das Neves, inaugurando lo que pretendía ser un nuevo “renacimiento de la política” de la mano de sus “jóvenes brillantes”. Oráculos de la nada, que hoy calientan  los banquillos del Poder Judicial.

Rápidamente detectó Das Neves el facilismo de comprometer los recursos de la Provincia para garantía de créditos que le permitían gastar y simular un crecimiento artificial del Estado, que jamás tuvo como fundamento la organización social, la producción, la capacitación y la coordinación de esfuerzos entre sectores del trabajo y la producción.

No estuvo solo en eso Das Neves, inmensa colaboración prestó una oposición muchas veces cómplice, empapada en las conveniencias de la ubicuidad, el mantenimiento de los privilegios y el silencio cómodo y calentito que garantiza siempre  la conservación de algunos  pedacitos de poder.

Algún día se investigarán en serio los vergonzosos contratos con Panamerican Energy, emblemas del abuso del poder en la Administración de nuestros recursos.

Luego del arranque y consolidación de esas prácticas, siguió BUZZI, luego nuevamente Das Neves  y ahora Arcioni, todos productos de la misma matriz  utilitaria, sin proyectos, gerentes todos de una administración  facilista, sin visión y hoy, incapaces de administrar su propia crisis.

Porque lo que está ocurriendo, no solamente es que Chubut es una Provincia agotada absolutamente de recursos, también sucede algo gravísimo: no hay Estado, nadie puede sentarse con autoridad en la mesa de las negociaciones, por su pasado de estafadores de la voluntad popular.

No hay autoridad material y tampoco moral, lo que facilita la represión sin culpas, último mecanismo de control social cuando la política ha fracasado en todos los frentes.

La violencia es el último y doloroso eslabón de la cadena  de las grandes injusticias sociales. Mientras tanto es bueno recordar cuándo y porqué comenzó, quienes fueron los protagonistas con nombre y apellido que provocaron esta situación.

Quizás los nuevos vientos  que comienzan a soplar en la querida Argentina lleguen algún día a nuestra Provincia.

 

* Dr. Alejandro Fernández Vecino. Abogado. Titular de la Cátedra de Derecho Político de la Facultad de Ciencias Jurídicas (UNPSJB).

 

Nuestro grupo repudia la violencia que surge de la Injusticia,

la Incompetencia y la Corrupción.

                                                         Grupo De Este Lado Esquel-Trevelin