La afirmación corresponde a Silvana Díaz vecina que, desde la docencia y el trabajo comunitario, brinda apoyo a jóvenes y adultos que desean culminar sus estudios. A ellos les aconseja “seguir estudiando” porque “la educación es una de las herramientas que libera”. Desde su faceta de militante Justicialista no descartó la posibilidad de integrar una Lista de cara a las elecciones de 2019. “Tendría que evaluarlo en el momento”, manifestó.

Licenciada en Ciencias Políticas, Profesora de Nivel Inicial, concejal mandato cumplido (2007 – 2011), coordinadora del Plan de Finalización de Estudios Primarios y Secundarios (FinES) –  diseñado para brindar a jóvenes y adultos que no pudieron terminar su escolaridad el apoyo y las herramientas necesarias para culminar sus estudios – definen a una joven vecina que supo ganarse a fuerza de trabajo y compromiso la consideración de sus pares dentro del Concejo Deliberante años atrás.

Hoy, un tanto más alejada de la política partidaria, continua trabajando por la comunidad brindado saberes a jóvenes y adultos y rescatando la memoria de los barrios. Sobre estos y otros temas Silvana Díaz dialogó con La Portada en una entrevista en la que no descartó volver a integrar una Lista – de cara a las elecciones de 2019 – u ocupar un cargo público.

La Portada: ¿Qué significó coordinar el Plan FinES?

Silvana Díaz: Fue una hermosa oportunidad para compartir la experiencia con los estudiantes. Uno aprende mucho de la gente. El esfuerzo, la lucha en tiempos de crisis y la fortaleza hacen a la instancia de aprendizaje en grupo. Significó poder acompañarlos en el trayecto pendiente para muchos desde lo que uno podía llegar a hacer porque no hay fórmulas para esto. Había que acompañarlos, hablar con ellos, buscarlos cuando se perdían, animarlos, ser el nexo entre ellos y los profesores y entre ellos. Significó también tener apertura para poder escuchar y estar cuando ellos lo pedían. Fue un trabajo más social que pedagógico.

L.P: ¿Cuál fue el momento más difícil?

S.D: La incertidumbre de este año de no saber si se iba a continuar o no con los grupos que ya venían trabajando. Cuando comenzamos en 2014 había más de ciento cincuenta personas anotadas que comenzaron en las sedes  Don Bosco, Matadero y ATECh.  Se hizo una tarea bastante dinámica porque había que estar en los tres lugares con diferentes grupos de chicos y adultos tratando que todo este bien. En 2015 se desarrolló el programa sin problemas – salvo el pago atrasado a los docentes – y este año no había certeza de que comenzara.

  1. P: ¿En que otro proyecto comunitario trabajó este año?
  2. D: Finalizamos hace poco, en el barrio 28 de Junio, el proyecto “Marcando Huellas por mi Barrio” junto a la Asociación Vecinal, Biblioteca Tolkeyen y los vecinos pioneros del barrio. El proyecto tenía que ver con el rescate de la memoria oral para reconstruir la historia entre todos. La idea fue rescatar vivencias y experiencias de la gente de un barrio construido por ayuda mutua. Este proyecto se llevó a cabo todo el año con la concurrencia de los vecinos que – cada quince días – los sábados se reunían a tomar mate y a charla sobre su llegada al barrio y sus sueños como por ejemplo construir su casa de manera propia.

L.P: ¿Qué le dejó su paso por el Concejo Deliberante?

  1. D: Me dejó experiencia que pude capitalizar luego en mi tarea docente, en la visión integral de la comunidad y el trabajo en equipo. El trabajo fue muy lindo y fructífero siempre pensando en el bienestar de la comunidad. Había ida y vuelta con el Ejecutivo y con las organizaciones intermedias de la comunidad.

L.P: ¿Qué significó el hecho que sus pares destacaran su labor?

S.D: Es lo que uno sabe hacer. En casa siempre se inculcó la cultura del trabajo independientemente de los lugares donde uno esté. Uno hace en función a principios y valores que tiene como persona.

L.P: ¿Qué opinión le merece el trabajo del actual Concejo Deliberante?

S.D: No estoy muy involucrada, pero tampoco desatenta. La conformación es totalmente distinta y estamos en otro contexto a nivel local, provincial y nacional entonces la dinámica de trabajo debe ser diferente. No es un trabajo fácil y debe hacerse de manera conjunta en consonancia con los intereses de la comunidad. El Concejo Deliberante es la apropiación de los vecinos con el espacio para presentar proyectos, para reclamar o manifestarse. La Banca del Vecino cumple un papel fundamental en ese aspecto.

L.P: ¿Cómo calificaría la situación social de Esquel?

S.D: Actualmente es muy compleja. Doy clases a gente joven y adulta: allí está la muestra de lo que pasa socialmente. La falta de trabajo es lo que más incide en los proyectos de vida de los jóvenes y en la búsqueda de otras alternativas que a veces no están. También están los jóvenes que no se pueden ir a estudiar con la incertidumbre de lo que se puede hacer acá. En los barrios  se ve mucha demanda y pocas respuestas con la dificultad de la actual crisis que no es ajena a ninguno especialmente para los sectores más vulnerables.

L.P: ¿Cuáles serían las acciones para superar esta situación?

S.D: Hay varias cosas, pero tienen que estar en consonancia y articuladas. Las cosas aisladas no funcionan. Hay algo central que es la cuestión laboral porque es el eje de la vida social en general. A nivel social, también, se pueden dar respuestas más focalizadas pero el tema laboral atraviesa la vida de cada familia.

L.P: ¿Está en sus planes volver a la política partidaria?

  1. D: Sigo siendo militante y uno es lo que hace silenciosamente desde su trabajo con una ideología (justicialista). Tendría que pensarlo y evaluarlo en el momento.
  2. P: ¿Qué mensaje le brindaría a los jóvenes?

S. D: El mensaje sería la visión de futuro. El FinES fue un poco esto de saber que se puede. Y la educación es una de las principales herramientas que libera. Hay que seguir estudiando y apostando al bien de la comunidad. No hay que perder la visión de la responsabilidad, compromiso y bien social.